Aquel día recitarás: Te doy gracias, Señor, porque estabas airado contra mí, pero ha cesado tu ira y me has consolado.
Mateo 5:4 - Nueva Biblia Española (1975) Dichosos los que sufren, porque ésos van a recibir el consuelo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios bendice a los que lloran, porque serán consolados. Biblia Católica (Latinoamericana) Felices los que lloran, porque recibirán consuelo. La Biblia Textual 3a Edicion Bienaventurados los que lloran,° porque ellos serán consolados. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bienaventurados los que lloran; porque ellos serán consolados. |
Aquel día recitarás: Te doy gracias, Señor, porque estabas airado contra mí, pero ha cesado tu ira y me has consolado.
y aniquilará la muerte para siempre. El Señor enjugará las lágrimas de todos los rostros y alejará de la tierra entera el oprobio de su pueblo -lo ha dicho el Señor-.
Vecinos de Sión, habitantes de Jerusalén, no tendrán que llorar, porque se apiadará al oír tu gemido, apenas te oiga, te responderá.
y Volverán por ella los rescatados del Señor: volverán a Sión con cánticos: en cabeza, alegría perpetua, siguiéndolos, gozo y alegría; pena y aflicción se alejarán.
Yo vi. sus andanzas, pero lo curaré, lo guiaré, lo pagaré con consuelos;
Festejen a Jerusalén, gocen con ella, todos los que la aman; alégrense de su alegría los que por ella llevaron luto;
Todo esto lo hicieron mis manos, y existió todo esto -oráculo del Señor- . Pero en ése pondré mis ojos: en el humilde y en el abatido que se estremece ante mis palabras.
Los que escapan huyendo a las montañas, gimiendo como palomas, morirán todos ellos, cada cual por su culpa.
y le dijo el Señor: Recorre la ciudad, atraviesa Jerusalén y marca en la frente a los que se lamentan afligidos por las abominaciones que en ella se cometen.
Sobre la dinastía davídica y los vecinos de Jerusalén derramaré un espíritu de compunción y de pedir perdón. Al mirarme traspasado por ellos mismos, harán duelo como por un hijo único, llorarán como se llora a un primogénito.
Pero Abrahán le contestó: Hijo, recuerda que en vida te tocó a ti lo bueno y a Lázaro lo malo; por eso ahora él encuentra consuelo y tú padeces.
Dichosos ustedes los que ahora pasan hambre, porque van a ser satisfechos. Dichosos ustedes los que ahora lloran, porque van a reír.
¡Ay de ustedes, los que ahora están satisfechos, porque van a pasar hambre! ¡Ay de ustedes los que ahora ríen, porque van a lamentarse y a llorar!
se colocó detrás de él junto a sus pies, llorando, y empezó a regarle los pies con sus lágrimas; se los secaba con el pelo, los cubría de besos y se los ungía con el perfume.
Dichoso el hombre que resiste la prueba, porque, al salir airoso, recibirá en premio la vida que Dios ha prometido a los que lo aman. '
El enjugará lágrimas de sus ¡ojos, ya no habrá muerte ni luto ni llanto ni dolor, pues lo de antes ha pasado'.