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Joel 3:18 - Nueva Biblia Española (1975)

Aquel día los montes manarán licor, los collados se desharán en leche, las cañadas de Judá irán llenas de agua; brotará un manantial en el templo del Señor que engrosará el Torrente de las Acacias.

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Biblia Reina Valera 1960

Sucederá en aquel tiempo, que los montes destilarán mosto, y los collados fluirán leche, y por todos los arroyos de Judá correrán aguas; y saldrá una fuente de la casa de Jehová, y regará el valle de Sitim.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

En aquel día las montañas destilarán vino dulce, y de los montes fluirá leche. El agua llenará los arroyos de Judá, y del templo del Señor brotará una fuente que regará el árido valle de las acacias.

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La Biblia Textual 3a Edicion

En aquel día sucederá que los montes destilarán vino dulce, Los collados manarán leche, Las cañadas de Judá desbordarán de agua, Y de la Casa de YHVH brotará un manantial Que regará el valle° de Sitim.°

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y será que en aquel tiempo las montañas destilarán vino nuevo, y los collados fluirán leche, y por todos los ríos de Judá correrán aguas; y saldrá una fuente de la casa de Jehová, y regará el valle de Sitim.

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Joel 3:18
18 Tagairtí Cros  

Lavaba mis pies en leche y la roca me daba ríos de aceite.


El correr de las acequias alegra la ciudad de Dios, el Altísimo consagra su morada.


Y he bajado a librarlos de los egipcios, a sacarlos de esta tierra para llevarlos a una tierra fértil y espaciosa, tierra que mana leche y miel, el país de los cananeos, hititas, amorreos, fereceos, heveos y jebuseos.


En todo monte elevado, en toda colina señera, habrá acequias y cauces de agua, el día de la gran matanza, cuando caigan las torres.


saltará como un Ciervo el cojo, la lengua del mudo cantará; porque ha brotado agua en el desierto, torrente en la estepa,


voy a derramar agua sobre el sequedal y torrentes en el páramo; voy a derramar mi aliento sobre tu estirpe y mi bendición sobre tus vástagos.


Cielos, destilen el rocío; nubes, derramen la victoria; ábrase la tierra y brote la salvación, y con ella germine la justicia: yo, el Señor, lo he creado.


¡Atención, sedientos!, acudan por agua, también los que no tienen dinero: vengan, compren trigo, coman sin pagar, vino y leche de balde.


mamarán a sus pechos y se saciarán de sus consuelos, y apurarán las delicias de sus ubres abundantes.


y vendrán entre aclamaciones a la altura de Sión, afluirán hacia los bienes del Señor: trigo y vino y aceite, y rebaños de vacas y ovejas; serán como huerto regado, no volverán a desfallecer,


Pueblo mío, recuerda lo que maquinaba Balac, rey de Moab, y cómo respondió Balaán, hijo de Beor; recuerda desde Acacias a Guilgal, para que comprendas que el Señor tiene razón.


Aquel día brotará un manantial en Jerusalén: la mitad fluirá hacia el mar oriental, la otra mitad hacia el mar occidental, lo mismo en verano que en invierno.


Estando Israel en Acacias, el pueblo comenzó a prostituirse con las muchachas de Moab,