Jacob dijo a su familia y a cuantos estaban con él: “Arrojad todos los dioses extraños que haya entre vosotros; purificaos y mudaos de ropas,'
1 Samuel 7:3 - Biblia Nacar-Colunga Dijo, pues, Samuel: “Si de todo corazón os convertís a Yahvé, quitad de en medio de vosotros los dioses extraños y las astartés; enderezad vuestro corazón a Yahvé y servidle sólo a El, y El os librará de las manos de los filisteos.” Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Habló Samuel a toda la casa de Israel, diciendo: Si de todo vuestro corazón os volvéis a Jehová, quitad los dioses ajenos y a Astarot de entre vosotros, y preparad vuestro corazón a Jehová, y solo a él servid, y os librará de la mano de los filisteos. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Samuel le dijo a todo el pueblo de Israel: «Si de todo corazón desean volver al Señor, desháganse de sus dioses ajenos y de las imágenes de Astoret. Dediquen su corazón al Señor y obedézcanlo solamente a él; entonces él los rescatará de los filisteos». Biblia Católica (Latinoamericana) Samuel declaró a todo el pueblo de Israel: 'Si realmente ustedes quieren volver a Yavé, quiten de en medio de ustedes los dioses extranjeros y las Astartés. Pongan su corazón en Yavé y sólo sírvanlo a él; sólo así los librará de las manos de los filisteos'. La Biblia Textual 3a Edicion Y habló Samuel a toda la casa de Israel, diciendo: Si os volvéis a YHVH con todo vuestro corazón, quitad de en medio vuestro a los dioses extraños y a Astarot, y preparad vuestro corazón para YHVH. Servidle sólo a Él, y Él os librará de mano de los filisteos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Samuel dijo entonces a toda la casa de Israel: 'Si de todo corazón os volvéis a Yahveh, quitad de en medio de vosotros los dioses extraños y las Astartés, orientad vuestro corazón hacia Yahveh, servidle a él solo, y entonces él os librará del poder de los filisteos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Samuel habló a toda la casa de Israel, diciendo: Si de todo vuestro corazón os volvéis a Jehová, quitad de entre vosotros a los dioses ajenos y a Astarot, y preparad vuestro corazón a Jehová, y servidle sólo a Él, y Él os librará de mano de los filisteos. |
Jacob dijo a su familia y a cuantos estaban con él: “Arrojad todos los dioses extraños que haya entre vosotros; purificaos y mudaos de ropas,'
Porque me han abandonado y se han prosternado ante As-tarté, diosa de los sidonios; ante Gamos, dios de Moab, y ante Milcom, dios de los hijos de Amón. No han marchado por mis caminos, haciendo lo que es bueno a mis ojos y guardando mis leyes y mandamientos, como lo hizo David, su padre.'
y se convierten a ti de todo su corazón y de toda su alma, en la tierra de los enemigos que los cautivaron, y oran a ti, hacia su tierra, la que diste a sus padres, y hacia la ciudad que elegiste y la casa que yo he edificado a tu nombre,
sino que temeréis a Yahvé, vuestro Dios, y El os librará de las manos de todos vuestros enemigos.”
Derribó también el altar de Betel, el alto que había hecho Jeroboam, hijo de Nabat, que había hecho pecar a Israel; destrozó sus piedras y las redujo a polvo, y quemó la”asera.”
Poned, pues, todo vuestro corazón y vuestro ánimo en buscar a Yahvé, vuestro Dios; levantaos y edificad el santuario de Yahvé, Dios, para traer el arca de la alianza de Yahvé y los utensilios consagrados a Dios a la casa edificada al nombre de Yahvé.”
Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre y sírvele con corazón perfecto y ánimo generoso; porque Yahvé escudriña los corazones de todos y penetra todos los designios y todos los pensamientos. Si tú le buscas, le hallarás; mas si le dejas, te rechazará para siempre.'
Pero hay en ti buenas obras, porque has arrancado de la tierra las “aseras” y has puesto tu corazón en buscar a Yahvé.”
Pero los altos no desaparecieron y el pueblo no tenía su corazón firmemente apegado al Dios de sus padres.
a Yahvé, Dios de sus padres; no les impute el no estar suficientemente purificados.”
Del hombre es preparar la mente, pero es Yahvé quien da la respuesta de la lengua.
Deje el impío sus caminos, y el malvado sus pensamientos, y vuélvase a Yahvé, que tendrá de él misericordia; a nuestro Dios, que es rico en perdones.'
y les daré un corazón para que reconozcan que yo soy Yahvé, y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios, pues se convertirán a mí de todo corazón.
a ver si, oyendo la casa de Judá todos los males que yo pienso traer sobre ella, se convierte cada uno de sus malos caminos, y yo les perdonaré sus iniquidades y pecados.
Si te conviertes, Israel — oráculo de Yahvé — , volverás a mí. Si quitas de delante de mí tus abominaciones, no andarás errante.
Di, por tanto, a la casa de Israel: Así habla el Señor, Yahvé: Convertios y apartaos de vuestros ídolos y apartad la vista de vuestras abominaciones,
Arrojad de sobre vosotros todas las iniquidades que cometéis, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué habéis de querer morir, casa de Israel?
Viene sobre Samaría el castigo porque se rebeló contra su Dios. Caerán a la espada sus párvulos, serán estrellados, y sus mujeres encinta serán hendidas.
“Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí;'
Díjole entonces Jesús: Apártate, Satanás, porque escrito está: “Al Señor tu Dios adorarás y a El solo darás culto.”
Nadie puede servir a dos señores, pues o bien aborreciendo al uno, menospreciará al otro, o bien adhiriéndose al uno menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.
Jesús, respondiendo, le dijo: Está escrito: “Al Señor tu Dios adorarás y a El sólo servirás.”
Dios es espíritu, y los que le adoran han de adorarle en espíritu y en verdad.
Teme a Yahvé, tu Dios; sírvele, apégate a El y jura por su nombre.'
Tras de Yahvé, vuestro Dios, habéis de ir; a El habéis de temer, guardar sus mandamientos, obedecer su voz, servirle y allegaros a El.'
Allí buscaréis a Yahvé, vuestro Dios, y le hallaréis si con todo tu corazón y con toda tu alma le buscas.
la mitad de Galaad, Astarot y Edraí, ciudades del reino de Og en Basan, fueron dadas a Maquir, hijo de Manases, a la mitad de los hijos de Maquir, según sus familias.
Temed a Yahvé y servidle con integridad, y en verdad, quitad los dioses a quienes sirvieron vuestros padres al otro lado del río y en Egipto y servid a Yahvé.
Quitad, pues, los dioses ajenos que hay entre vosotros y volved vuestros corazones a Yahvé, Dios de Israel.”
Quitaron de en medio de ellos los dioses extraños y sirvieron a Yahvé, que no pudo soportar la aflicción de Israel.
Volvieron los hijos de Israel a hacer mal a los ojos de Yahvé, y sirvieron a los baales y astartés, a los dioses de Sidón, a los de Moab, a los de los hijos de Amón, a los de los filisteos, y se apartaron de Yahvé, no sirviéndole más.
Los hijos de Israel hicieron el mal a los ojos de Yahvé y sirvieron a los baales.
Las armas de Saúl las depositaron en el templo de Astarté, y su cuerpo lo colgaron de las murallas de Betsán.