Job 5:21 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²¹ Cuando alguien te maldiga, no tendrás por qué tener miedo; esa maldición no se cumplirá.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²¹ Del azote de la lengua serás encubierto; No temerás la destrucción cuando viniere.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Estarás seguro ante la calumnia y no tendrás miedo cuando llegue la destrucción.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Estarás protegido de la lengua malvada, sin miedo a que llegue el salteador.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ Estarás a cubierto del azote de la lengua, Y no temerás cuando llegue el desastre.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ libre estarás del azote de la lengua, no temerás si la devastación viniere;

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²¹ Del azote de la lengua serás encubierto; no temerás de la destrucción cuando viniere.

Job 5:21 Referencias Cruzadas

Job 5:15

pero salva a la gente pobre del poder de sus enemigos;

Salmos 31:20

20 (21) Tu presencia los pone a salvo de los planes malvados; tú los proteges de la maldad como protege la gallina a sus pollitos.

Salmos 31:21

21 (22) ¡Bendito seas, Dios mío! Cuando yo estuve en problemas me mostraste tu gran amor.

Salmos 55:21

21 (22) Dentro de ellos solo piensan en pelear. Sus palabras son amables y suaves como la mantequilla; ¡son más suaves que el aceite, pero más cortantes que un cuchillo!

Salmos 57:4

4 (5) Estoy por el suelo, rodeado de leones; rodeado de hombres que parecen bestias. En vez de dientes, tienen lanzas y flechas; en vez de lengua, tienen una espada afilada.

Proverbios 12:18

El que habla sin pensar hiere como un cuchillo, pero el que habla sabiamente sabe sanar la herida.

Proverbios 3:25

No sufrirás las desgracias que caen sobre los malvados.

Isaías 54:17

Sin embargo, nadie ha hecho un arma capaz de destruirte. »Israel, tú harás callar a todo el que te acuse, porque yo, el único Dios, hago triunfar a los que me adoran. Te juro que así será».

Jeremías 18:18

La gente comenzó a hacer planes en contra de Jeremías. Decían: «Acusémoslo de algún crimen, y así lo callaremos para siempre. De todos modos, nunca nos faltará un sacerdote que nos enseñe la ley, ni un sabio que nos dé consejos, ni un profeta que nos hable de parte de Dios».