2 Crónicas 20:7 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

⁷ »Dios nuestro, tú expulsaste a los pueblos que antes vivían en este territorio, y nos lo diste a nosotros, que somos descendientes de tu amigo Abraham.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Dios nuestro, ¿no echaste tú los moradores de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste a la descendencia de Abraham tu amigo para siempre?

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Oh Dios nuestro, ¿acaso no expulsaste a los que vivían en esta tierra cuando llegó tu pueblo Israel? ¿Acaso no les diste esta tierra para siempre a los descendientes de tu amigo Abraham?

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ ¿No has sido tú, oh Dios nuestro, el que expulsaste a los habitantes de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste a los descendientes de tu amigo Abraham para siempre?

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ ¿No arrojaste Tú, oh Dios nuestro, delante de tu pueblo Israel, a los habitantes de esta tierra, y la diste para siempre a la simiente de tu amigo Abraham?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ ¿No fuiste tú, oh Dios nuestro, quien expulsaste a los moradores de esta tierra delante de tu pueblo Israel y se la entregaste a la descendencia de tu amigo Abrahán para siempre?

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁷ ¿No eres tú nuestro Dios, que echaste a los moradores de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste a la simiente de Abraham tu amigo para siempre?

2 Crónicas 20:7 Referencias Cruzadas

Génesis 12:7

Allí Dios se le apareció y le dijo: «Toda esta región se la daré a tus descendientes». Como Dios se le apareció allí, Abram le construyó un altar.

Génesis 13:15

Voy a darte toda la tierra que alcances a ver. Para siempre será tuya y de tus descendientes.

2 Crónicas 14:11

11 (10) Luego oró a Dios, diciendo: «Dios nuestro, nos hemos atrevido a pelear contra este ejército tan grande, porque confiamos en ti y queremos honrarte. No hay nadie como tú para ayudar al débil y liberarlo del poderoso. Por eso te rogamos que nos ayudes. ¡Tú eres nuestro Dios! ¡Sabemos que nadie te puede vencer!»

2 Crónicas 20:8

»Este ha sido nuestro país, y en él edificamos un templo para honrarte; allí hicimos esta oración:

Nehemías 9:8

Podías confiar en él, y por eso le prometiste hacer de sus descendientes los dueños de un gran territorio. »Ese territorio lo ocupaban los cananeos y los hititas, los amorreos y los ferezeos, los jebuseos y los gergeseos. ¡Y tú cumpliste la promesa! ¡En ti se puede confiar!

Salmos 44:2

2 (3) Tú mismo echaste de su tierra a los otros pueblos; los destruiste por completo, y en lugar de ellos pusiste a nuestro propio pueblo, y lo hiciste prosperar.

Salmos 44:3

3 (4) No fue con la espada como ellos conquistaron esta tierra; no fue la fuerza de su brazo lo que les dio la victoria. ¡Fue tu mano poderosa! ¡Fue la luz de tu presencia, porque tú los amabas!

Salmos 80:8

8 (9) Nosotros somos como una vid que trajiste de Egipto, y para plantarnos en esta tierra echaste fuera a las naciones;

Éxodo 20:2

«Yo soy el Dios de Israel. Yo los saqué de Egipto, donde eran esclavos.

Isaías 41:8

Dios siguió diciendo: «Escúchenme, israelitas, descendientes de mi amigo Abraham,

Juan 15:15

Ya no los llamo sirvientes, porque un sirviente no sabe lo que hace su jefe. Los llamo amigos, porque les he contado todo lo que me enseñó mi Padre.

Santiago 2:23

Así se cumplió lo que dice en la Biblia: «Abraham confió en la promesa de Dios, y por eso Dios lo aceptó». Fue así como Abraham se hizo amigo de Dios.

Josué 1:6

Pero tú debes ser fuerte y valiente, porque serás tú quien guíe al pueblo de Israel para que reciba el territorio que les prometí a sus antepasados.

Josué 23:9

porque a medida que ustedes avanzaban él expulsó a naciones grandes y poderosas. Nadie ha podido hacerles frente.

Josué 24:13

Yo les di a ustedes esas tierras, no tuvieron que trabajarlas ni edificar ciudades. Ahora viven allí, y comen uvas y aceitunas de huertos que jamás plantaron”».

Josué 24:3

Desde ese país conduje a Abraham por toda la tierra de Canaán, le di un hijo que se llamó Isaac, y de él nació una familia numerosa.