Isaías 58:1 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Grita con fuerza y sin miedo. Levanta tu voz como trompeta y denuncia a mi pueblo sus maldades, y sus pecados a la familia de Jacob.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹ Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ «Grita con la voz de un toque de trompeta. ¡Grita fuerte! No seas tímido. ¡Háblale a mi pueblo Israel de sus pecados!

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ ¡Clama a voz en cuello, no te detengas, Alza tu voz como una trompeta! ¡Denuncia a mi pueblo su rebelión, A la casa de Jacob sus pecados!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Clama a voz en cuello, no te contengas, alza tu voz como trompeta y anuncia a mi pueblo su rebelión y a la casa de Jacob sus pecados.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹ Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su transgresión, y a la casa de Jacob sus pecados.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹ Dios le dijo a Isaías: «¡Grita bien fuerte, grita sin miedo, alza la voz como una trompeta! ¡Reprende a mi pueblo, el pueblo de Israel, a causa de sus culpas y de todos sus pecados!

Isaías 58:1 Referencias Cruzadas

Isaías 2:5

Pueblo de Jacob, ven: ¡caminemos a la luz de Yavé!

Isaías 27:13

Aquel día, al sentir el fuerte sonido de la trompeta, acudirán los que andaban perdidos por el país de Asur y los que estaban desparramados por la tierra de Egipto, y adorarán a Yavé en el cerro santo de Jerusalén.

Isaías 40:6

Una voz dice: 'Grita. Y yo respondo: '¿Qué he de gritar?' La voz dice: 'Toda carne es hierba, y toda su delicadeza como flor del campo.

Isaías 43:27

Ya pecó tu primer padre, y después se han rebelado tus portavoces;'

Isaías 50:1

Así habla Yavé: ¿Acaso despedí a su madre? ¡Muéstrenme el certificado de divorcio!

Isaías 56:10

¡Esos cuidadores están todos ciegos, no saben nada! Son todos como perros mudos, que no pueden ladrar. Tendidos en sus lechos, no hacen más que dormir y soñar.

Isaías 57:12

Mas, ahora, voy a denunciar tu buena conducta y tus acciones que no te sirvieron para nada.

Isaías 59:12

Pues a menudo te hemos sido infieles, y nuestras propias faltas nos acusan. En efecto, tenemos siempre presentes nuestros pecados y reconocemos nuestros yerros:

Jeremías 2:2

Así dice Yavé: 'Aún me acuerdo de la pasión de tu juventud, de tu cariño como de novia, cuando me seguías por el desierto, por la tierra sin cultivar.

Jeremías 36:9

En el año quinto de Joaquim, rey de Judá, en el mes noveno, convocaron para un ayuno a toda la gente de Jerusalén y de las ciudades de Judá, y éstos vinieron a Jerusalén.

Jeremías 6:17

Les puse entonces centinelas: '¡Estén atentos cuando toquen la trompeta!' Y también contestaron: 'No queremos atender.

Lamentaciones 2:14

Tus profetas anunciaron para ti falsedad y tonterías. No te descubrieron tu culpa para ahorrarte el cautiverio. Tuvieron para ti presagios de falsedad y de ilusión.

Ezequiel 11:4

¡Por eso, profetiza contra ellos esta profecía, hijo de hombre!'

Ezequiel 16:2

Hijo de hombre, hazle ver a Jerusalén todas sus horribles acciones.

Ezequiel 20:4

Júzgalos, hijo de hombre, ¿no los vas a juzgar? Hazles ver las horribles acciones de sus padres.

Ezequiel 22:2

Hijo de hombre, ¿no juzgarás a la ciudad sanguinaria?

Ezequiel 23:36

Yavé me dijo de nuevo: Hijo de hombre, ¿no quieres juzgar a Ohola y a Oholiba y echarles en cara sus crímenes?

Ezequiel 33:3

Si ve que la espada amenaza al lugar, toca el cuerno y le avisa al pueblo.

Oseas 8:1

Prepárate a tocar la corneta pues aquí viene la desgracia y se deja caer como un águila sobre los de la Casa de Yavé. No han respetado mi alianza y han rechazado mi Ley.

Jonás 1:2

Levántate, vete a Nínive, la ciudad grande, y predica contra ellos, porque su maldad ha subido hasta mí.

Tito 2:15

Tú enseña estas cosas, aconsejando y reprendiendo con toda autoridad. No dejes que nadie te menosprecie.

Apocalipsis 1:10

Se apoderó de mí el Espíritu el día del Señor y oí a mis espaldas una voz que sonaba como trompeta:

Apocalipsis 4:1

Después de esto miré. Vi una puerta abierta en el cielo y la voz que antes había oído semejante a una trompeta me decía: 'Sube aquí y te mostraré lo que va a suceder en seguida.