La muerte y la vida están en poder de la lengua, los que la usan comerán de su fruto.
Todos faltamos de muchas maneras. Si uno no falta en las palabras, es un hombre perfecto, capaz de refrenar también todo su cuerpo.
Panal de miel son las palabras amables, dulzura para el alma y medicina para el cuerpo.
Así también la lengua es un pequeño miembro que se atreve a grandes cosas. Observad que una pequeña chispa puede incendiar un bosque inmenso.
Aguas profundas son las palabras de un hombre; torrente que inunda, la fuente de la sabiduría.
La lengua es también de fuego; el mundo de la injusticia. La lengua puesta en medio de nuestros miembros infecta todo nuestro cuerpo y prende fuego al curso de nuestra vida, cuando ella está incendiada con el fuego del infierno.
Pero nadie ha podido domar nunca la lengua: es un azote irrefrenable, llena de veneno mortífero.
La boca del justo es fuente de vida, pero la boca del malhechor oculta la violencia.
con la palabra de verdad, con el poder de Dios; mediante las armas ofensivas y defensivas de la justicia;
Así también la lengua es un pequeño miembro que se atreve a grandes cosas. Observad que una pequeña chispa puede incendiar un bosque inmenso.
La lengua es también de fuego; el mundo de la injusticia. La lengua puesta en medio de nuestros miembros infecta todo nuestro cuerpo y prende fuego al curso de nuestra vida, cuando ella está incendiada con el fuego del infierno.
Pero cuando os entreguen, no os preocupéis sobre cómo habéis de hablar o qué habéis de decir, porque en aquel momento se os sugerirá lo que debéis decir.
Las palabras de la boca del sabio son agradables; pero los labios del tonto causan su propia ruina.
Aunque hable las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, no soy más que una campana que toca o unos platillos que resuenan.
¿Quién es el que ama la vida y quiere vivir años felices?. Guarde del mal su lengua y sus labios de palabras mentirosas.
Apártese del mal y haga el bien busque la paz y corra en pos de ella.
Un lenguaje distinguido no cae bien al insensato, y menos aún una lengua mentirosa al noble.
Las palabras imprudentes hieren como una espada, la lengua de los sabios cura las heridas.
¿Quién es el que ama la vida y quiere vivir años felices?
Guarda del mal tu lengua, y tus labios de palabras mentirosas;
El que cree que es religioso, pero no refrena su lengua, se engaña a sí mismo y su religiosidad no vale para nada.
No digáis palabras groseras; que vuestro lenguaje sea bueno, edificante y oportuno, para que hagáis bien a los que os escuchan.
¡Raza de víboras! ¿Cómo podéis vosotros hablar de cosas buenas, siendo malvados? Porque de lo que rebosa el corazón habla la boca.
El hombre bueno, de su bondad saca buenas cosas; y el hombre malo, de su maldad saca cosas malas.
Y yo os digo que de toda palabra ociosa que digan los hombres darán cuenta el día del juicio.
Porque por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado'.
Que vuestra conversación sea siempre agradable, sazonada con la sal de la gracia, sabiendo cómo debéis responder a cada uno.
Mis queridos hermanos, sabed que todo hombre debe ser pronto para escuchar, pero lento para hablar y para airarse;
Pero ahora dejad todo eso: la ira, el rencor, la malicia, los insultos y las groserías.
Mis queridos hermanos, sabed que todo hombre debe ser pronto para escuchar, pero lento para hablar y para airarse;
porque el hombre airado no practica la justicia de Dios.
Manzanas de oro sobre una fuente de plata, tal es la palabra dicha a su debido tiempo.
Y yo os digo que de toda palabra ociosa que digan los hombres darán cuenta el día del juicio.
Porque por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado'.
Pero ¿qué dice la Escritura? La palabra está cerca de ti, en tu boca, en tu corazón, esto es, la palabra de la fe que proclamamos.
Con el corazón se cree para la justicia, y con la boca se confiesa la fe para la salvación.
El hombre bueno saca el bien de la bondad que atesora en su corazón, y el malo saca el mal de la maldad que tiene, porque de la abundancia del corazón habla la boca'.
¿Quién es el que ama la vida y quiere vivir años felices?. Guarde del mal su lengua y sus labios de palabras mentirosas.
Por falta de leña se apaga el fuego; si no hay chismoso, se calma la contienda.
Carón sobre brasas y leña sobre fuego; tal es el hombre pendenciero para encender querellas.
Con ella bendecimos al Señor, nuestro Padre; y con ella maldecimos a los hombres, hechos a imagen de Dios.
De la misma boca salen las bendiciones y las maldiciones. Pero no debe ser así, hermanos míos.
El Señor Dios me ha dado una lengua de experto para que yo sepa responder al cansado. Cada mañana me despierta el oído para escuchar como un discípulo.
No mancha al hombre lo que entra por la boca, sino lo que sale de la boca; eso es lo que mancha al hombre'.
Aun el insensato, si se calla, pasa por sabio; por inteligente, si tiene los labios cerrados.
¿Ves a un hombre pronto para las palabras? De un necio se puede esperar más que de él.
Porque de la multitud de las preocupaciones nacen los sueños, y por el exceso de palabras se dicen disparates.
Hermanos, vosotros habéis sido llamados a ser hombres libres; pero procurad que la libertad no sea un pretexto para dar rienda suelta a las pasiones, antes bien, servíos unos a otros por amor.
guarda a tu siervo del orgullo, que el orgullo no me domine nunca; así seré perfecto y libre de pecado.
El sabio es comedido en sus palabras, y el inteligente mantiene la calma.
Aun el insensato, si se calla, pasa por sabio; por inteligente, si tiene los labios cerrados.
Hermanos míos, no queráis ser todos maestros, sabiendo que tendremos un juicio más severo.
Todos faltamos de muchas maneras. Si uno no falta en las palabras, es un hombre perfecto, capaz de refrenar también todo su cuerpo.
Que nadie te menosprecie por ser joven; debes ser, más bien, ejemplo para los creyentes, en el modo de hablar, en el comportamiento, en el amor, en la fe, en la honestidad.