Dios le dijo a Eva: “Haré que el embarazo sea más penoso, y que dar a luz sea más doloroso. Sin embargo, tendrás deseo por tu esposo y él te gobernará”.
Juan 16:21 - Versión Biblia Libre Una mujer que está en proceso de parto sufre de dolores porque ha llegado el momento, pero cuando el bebé nace, ella olvida la agonía por la alegría de que ha llegado un niño al mundo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo. Biblia Nueva Traducción Viviente Será como una mujer que sufre dolores de parto, pero cuando nace su hijo, su angustia se transforma en alegría, porque ha traído una nueva vida al mundo. Biblia Católica (Latinoamericana) La mujer se siente afligida cuando está para dar a luz, porque le llega la hora del dolor. Pero después que ha nacido la criatura, se olvida de las angustias por su alegría tan grande; piensen: ¡un ser humano ha venido al mundo!' La Biblia Textual 3a Edicion Cuando la mujer está de parto tiene congoja, porque ha llegado su hora; pero cuando ha dado° a luz al niñito, ya no se acuerda de la angustia por el gozo de que un hombre ha nacido al mundo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando la mujer va a dar a luz siente tristeza, porque llegó su hora, pero apenas da a luz al niño, no se acuerda ya de su angustia, por la alegría de haber traído un hombre al mundo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha venido su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo. |
Dios le dijo a Eva: “Haré que el embarazo sea más penoso, y que dar a luz sea más doloroso. Sin embargo, tendrás deseo por tu esposo y él te gobernará”.
Estarán aterrorizados; el dolor y la angustia se apoderarán de ellos; sufrirán como una mujer que da a luz. Se mirarán unos a otros conmocionados, con los rostros ardiendo de miedo.
Por ello, mi cuerpo está lleno de agonía. Me abruma el dolor, como el de una mujer que da a luz. Me confunde lo que oigo; me angustia lo que veo.
Ella dio a luz antes de ponerse de parto, dio a luz a un niño antes de que llegaran los dolores.
Retuércete en agonía como la mujer al dar a luz, pueblo de Sión, porque serás expulsado de la ciudad, y obligado a acampar a las afueras, y deportado a Babilonia. Pero el Señor te traerá de regreso y te rescatará del poder de tus enemigos.
¿Por qué gritan entonces? ¿Acaso no tienen un rey? ¿Acaso ha muerto tu rey para que sientas dolor como una mujer en proceso de parto?
Como dice la Escritura: “¡Regocíjense las que no tienen hijos y las que nunca han parido! ¡Griten de alegría, las que nunca han estado en labores de parto, porque la mujer abandonada tiene más hijos que la mujer que tiene esposo!”
Cuando la gente hable de paz y seguridad, de repente vendrá destrucción sobre ellos. Será como el inicio repentino de los dolores de parto, y ciertamente no escaparán.