Pues, si David mismo lo llama Señor, ¿cómo puede él ser el hijo de David?” Y la gran multitud estaba oyendo con mucho deleite lo que Jesús decía.
Juan 12:9 - Versión Biblia Libre Una gran multitud había descubierto que él estaba allí. Llegaron al lugar no solo para ver a Jesús sino porque querían ver a Lázaro, el hombre a quien Jesús había levantado de los muertos. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Gran multitud de los judíos supieron entonces que él estaba allí, y vinieron, no solamente por causa de Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien había resucitado de los muertos. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando toda la gente se enteró de que Jesús había llegado, corrieron en masa para verlo a él y también a Lázaro, el hombre al que Jesús había resucitado de los muertos. Biblia Católica (Latinoamericana) Muchos judíos supieron que Jesús estaba allí y fueron, no sólo por ver a Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. La Biblia Textual 3a Edicion Y una gran multitud de judíos supo que estaba° allí, y fueron no sólo por causa de Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Gran multitud de judíos se enteró de que Jesús estaba allí y acudieron, no solamente por Jesús, sino también por ver a Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces mucha gente de los judíos supieron que Él estaba allí; y vinieron no solamente por causa de Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de los muertos. |
Pues, si David mismo lo llama Señor, ¿cómo puede él ser el hijo de David?” Y la gran multitud estaba oyendo con mucho deleite lo que Jesús decía.
Seis días después de la Pascua, Jesús fue a Betania, al hogar de Lázaro, quien había sido levantado de los muertos.
Al día siguiente, las multitudes de personas que habían venido a la fiesta de la Pascua escucharon que Jesús iba de camino hacia Jerusalén.
Muchos en la multitud habían visto a Jesús llamar a Lázaro de la tumba y levantarlo de los muertos, y estaban contando el hecho.
Y como veían al hombre que había sido sanado justo ahí junto a ellos, no tuvieron nada que decir en respuesta a lo que había sucedido.