1 Juan 2:14 - Versión Biblia Libre Les escribo a ustedes, pequeñitos, porque ustedes conocen al Padre. Les escribo a ustedes, Padres, porque conocen al que ha existido desde el principio. Les escribo a ustedes, jóvenes, porque son fuertes. Porque la palabra de Dios vive en ustedes, y han vencido al maligno. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno. Biblia Nueva Traducción Viviente Les he escrito a ustedes, que son hijos de Dios, porque conocen al Padre. Les he escrito a ustedes, los que son maduros en la fe, porque conocen a Cristo, quien existe desde el principio. Les he escrito a ustedes, los que son jóvenes en la fe, porque son fuertes; la palabra de Dios vive en sus corazones, y han ganado la batalla contra el maligno. Biblia Católica (Latinoamericana) Les he escrito, hijitos, porque ya conocen al Padre. Les he escrito, padres, porque conocen al que es desde el principio.
Les he escrito, jóvenes, porque son fuertes, la Palabra de Dios permanece en ustedes y ya han vencido al Maligno. La Biblia Textual 3a Edicion Os estoy escribiendo,° hijitos, porque habéis conocido al Padre. Os estoy escribiendo, padres, porque habéis conocido al que es desde un principio. Os estoy escribiendo, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Os escribo, hijos, porque habéis conocido al Padre. Os escribo, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os escribo, jóvenes, porque sois fuertes, la palabra de Dios permanece en vosotros y habéis vencido al maligno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios mora en vosotros, y habéis vencido al maligno. |
Si ustedes permanecen en mí, y mis palabras en ustedes, entonces pueden pedir cualquier cosa que quieran, y les será dada.
Entonces Jesús le dijo a los judíos que creyeron en él: “Si siguen mi enseñanza, entonces ustedes son realmente mis discípulos.
Yo sé que ustedes son descendientes de Abraham. Sin embargo, ustedes están tratando de matarme porque se niegan a aceptar mis palabras.
Oramos para que sean poderosamente fortalecidos por su sublime fuerza, y tengan gran paciencia y perseverancia.
Dejen que el mensaje de Cristo habite completamente en ustedes. De las maneras más sabias instrúyanse unos a otros por medio de salmos e himnos y cantos espirituales, alabando a Dios con sus corazones.
“Esta es la relación que le prometo a la casa de Israel: Después de ese tiempo, dice el Señor, yo pondré mis leyes en sus mentes, y las escribiré en sus corazones. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.
Esta carta trata sobre la Palabra de vida que existía desde el principio, que hemos escuchado, que hemos visto con nuestros propios ojos y le hemos contemplado, y que hemos tocado con nuestras manos.
Si decimos que no hemos pecado, estamos llamando a Dios mentiroso, y su palabra no está en nosotros.
Les escribo a ustedes, padres, porque ustedes lo conocen a él, que ha existido desde el principio. Les escribo a ustedes, jóvenes, porque han vencido el mal.
Me alegré cuando vinieron algunos hermanos creyentes y me hablaron sobre tu compromiso con la verdad, y sobre cómo sigues viviendo conforme a ella.
Conozco tu paciencia, y lo que soportaste por mi causa, y sé que nunca te rendiste.
Si tienen oídos, oigan lo que el Espíritu le dice a las iglesias. A los que sean victoriosos yo les daré el privilegio de comer del árbol de la vida, que está en el Paraíso de Dios.