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Apocalipsis 1:11 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

que decía: – Escribe en un libro lo que ves y envíalo a las siete iglesias: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

que decía: «Escribe en un libro todo lo que veas y envíalo a las siete iglesias que están en las ciudades de Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Escribe en un libro lo que veas y envíalo a las siete Iglesias: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardes, Filadelfia y Laodicea.

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La Biblia Textual 3a Edicion

que decía:° Escribe lo que ves en un rollo, y envíalo a las siete iglesias:° a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardis, a Filadelfia y a Laodicea.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

que decía: 'Escribe en un rollo lo que vas a ver y envíalo a las siete iglesias: a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia; a Éfeso, y a Esmirna, y a Pérgamo, y a Tiatira, y a Sardis, y a Filadelfia, y a Laodicea.

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Otras versiones



Apocalipsis 1:11
37 Referencias Cruzadas  

Una de ellas se llamaba Lidia, era de la ciudad de Tiatira y era comerciante de telas de púrpura. Ella adoraba a Dios y nos estaba escuchando. El Señor abrió su corazón y prestaba mucha atención a lo que Pablo decía.


Por aquel tiempo, un judío de Alejandría llamado Apolos llegó a Éfeso. Tenía buena educación y habilidades retóricas, además, sabía mucho de las Escrituras judías.


Desde Mileto, Pablo mandó llamar a los líderes cristianos de la iglesia de Éfeso.


Cuando luché contra las fieras en Éfeso, ¿qué hubiera ganado yo si lo hubiera hecho solo por razones humanas? Si los muertos no son resucitados, entonces “comamos y bebamos, que mañana moriremos”.


Pero permaneceré en Éfeso hasta Pentecostés;


Pablo, apóstol de Jesucristo a través de la voluntad de Dios, para los consagrados y creyentes en Cristo Jesús;


Quiero que sepan lo mucho que estoy luchando por ustedes y también por los que están en Laodicea, inclusive por los que no me conocen personalmente, también lucho por ellos.


Cuando viajé a Macedonia te rogué que permanecieras en Éfeso, porque tú, mi querido Timoteo, tienes una misión: defender la sana doctrina contra algunos que enseñan una doctrina diferente a la nuestra.


Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto; pero Él, poniendo su mano derecha sobre mí, me dijo: – No tengas miedo. Yo soy el Primero y el Último.


Escribe lo que viste, lo que experimentaste, lo que está sucediendo y lo que va a suceder después de esto.


quien, por su parte, testificó con su propia vida la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo, todo lo que vio y experimentó.


Esta es la explicación del misterio de las siete estrellas que viste en mi mano derecha y de los siete candelabros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias y los siete candelabros son las siete iglesias.


Cordial saludo de Juan, a las siete iglesias que están en Asia: que la gracia, que es vivir la vida de Dios en Cristo Jesús, y la paz, que se fundamenta en la justicia, sean parte de la naturaleza cristiana de ustedes; de parte de Aquel que es, que era y que está viniendo; de parte de los siete espíritus que están ante su trono;


El Señor Dios dice: Yo soy Alfa y Omega, el que es, el que era y el que está viniendo; el Todopoderoso.


Cuando los siete truenos hablaron, yo estaba por escribir, pero oí una voz del cielo que me decía: “Guarda en secreto con sello lo que dijeron los siete truenos y no lo escribas”.


Entonces oí una voz del cielo que decía: “Escribe esto: plenamente felices los que a partir de este momento van muriendo en el Señor”. El Espíritu dice: “Sí, eso es cierto, ahora ellos descansarán de su trabajo, pues sus obras siguen con ellos; Dios los bendecirá por todo lo que han hecho.”


Y me dijo: Escribe: “¡Plenamente felices los que han sido invitados a la fiesta de bodas del Cordero!”. Luego me dijo: “Estas son verdaderas palabras de Dios”.


Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso: esto dice el que tiene las siete estrellas en su mano derecha y camina en medio de los siete candelabros de oro:


Escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: esto dice el que tiene la espada aguda de doble filo:


Escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: esto dice el Hijo de Dios, el que tiene los ojos como llamas de fuego y los pies como bronce brillante fundido:


Pero a los demás en Tiatira, es decir, a ustedes que no siguen esa doctrina, ni han llegado a conocer los “profundos secretos de Satanás”, les digo que ya no les impondré ninguna otra carga.


Escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: esto dice el Primero y el Último, el que estuvo muerto y volvió a vivir:


El que estaba sentado en el trono dijo: “¡Yo hago nuevas todas las cosas!”. Y también me dijo: “Escribe, porque estas palabras son confiables y verdaderas”.


También me dijo: “No selles las palabras de la profecía de este libro y no las mantengas en secreto, porque el tiempo de Dios está cerca.


Yo, Jesús, envié a mi ángel para que testifique a ustedes sobre todas estas cosas en las iglesias; Yo soy la raíz y la descendencia de David, la brillante estrella de la mañana”.


Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: esto dice el que tiene los siete espíritus de Dios y las siete estrellas: Conozco tus obras; tienes reputación de estar vivo, pero en realidad estás muerto.


Escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: esto dice el Amén, el Testigo fiel y Verdadero, el Principio de la creación de Dios:


Sin embargo, tienes en Sardis a unos pocos que no se han ensuciado la ropa; ellos, por ser dignos, andarán conmigo con vestiduras blancas.


Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: