Así dicen las Escrituras: «Te he hecho padre de muchas naciones». Y Abraham le creyó, porque sabía que era el Dios que da vida a los muertos y llama las cosas que no son como si ya existieran.
1 Corintios 1:28 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Eligió a los que este mundo considera los más insignificantes y despreciados. Eligió a los que no valen nada y dejó claro que, en realidad, es el mundo el que no vale nada. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, Biblia Nueva Traducción Viviente Dios escogió lo despreciado por el mundo —lo que se considera como nada— y lo usó para convertir en nada lo que el mundo considera importante. Biblia Católica (Latinoamericana) Dios ha elegido lo que es común y despreciado en este mundo, lo que es nada, para reducir a la nada lo que es. La Biblia Textual 3a Edicion y lo vil del mundo, y lo tenido en nada escogió Dios;° lo que no es, para anular lo que es. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y lo plebeyo del mundo y lo despreciable, lo que no cuenta, Dios lo escogió para destruir lo que cuenta. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es; |
Así dicen las Escrituras: «Te he hecho padre de muchas naciones». Y Abraham le creyó, porque sabía que era el Dios que da vida a los muertos y llama las cosas que no son como si ya existieran.
¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el maestro de la Ley? ¿Dónde el filósofo de esta época? Dios ha convertido en locura la sabiduría de este mundo.
En cambio, a los que ya entienden mejor lo que han creído, les hablo con sabiduría. Pero no se trata de la sabiduría de este mundo ni la de sus gobernantes, los cuales serán olvidados.
Me he portado como un loco, pero ustedes me han obligado a ello. Ustedes debían hablar bien de mí, pues de ningún modo soy inferior a los tales «superapóstoles», aunque yo no soy nada.
Entonces se presentará ese malvado, pero el Señor Jesús le quitará su poder con el soplo de su boca y lo destruirá con el glorioso brillo de su venida.
Por tanto, ya que ellos son de carne y hueso, Cristo también compartió esa naturaleza humana. Lo hizo para eliminar, mediante la muerte, al que tiene el dominio de la muerte —es decir, al diablo—.
Pues en una sola hora ha quedado destruida toda su riqueza». Todos los capitanes de barco, los pasajeros, los marineros y todos los que viven del mar se detendrán a lo lejos.