La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Números 11:11 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Moisés oró al Señor: —Si yo soy tu siervo, ¿por qué me tratas mal? ¿Por qué me niegas tu favor y me obligas a cargar con todo este pueblo?

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y dijo Moisés a Jehová: ¿Por qué has hecho mal a tu siervo? ¿y por qué no he hallado gracia en tus ojos, que has puesto la carga de todo este pueblo sobre mí?

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

y le dijo al Señor: —¿Por qué me tratas a mí, tu servidor, con tanta dureza? ¡Ten misericordia de mí! ¿Qué hice para merecer la carga de todo este pueblo?

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Le dijo a Yavé: '¿Por qué tratas tan mal a tu servidor? ¡No me has hecho ningún favor al imponerme la carga de todo este pueblo!'

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces dijo Moisés a YHVH: ¿Por qué maltratas a tu siervo? ¿Por qué no he hallado gracia ante tus ojos, para que hayas echado la carga de todo este pueblo sobre mí?

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

y dijo a Yahveh: '¿Por qué has tratado tan mal a tu siervo? ¿Por qué no gozo de tu favor, sino que echas sobre mí la carga de todo este pueblo?

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Moisés dijo a Jehová: ¿Por qué has hecho mal a tu siervo? ¿Y por qué no he hallado gracia en tus ojos, que has puesto la carga de todo este pueblo sobre mí?

Ver Capítulo
Otras versiones



Números 11:11
16 Referencias Cruzadas  

Le he dicho a Dios: No me condenes. Dime qué es lo que tienes contra mí.


Si tú, Señor, tomaras en cuenta los pecados, ¿quién, Señor, se mantendría en pie?


No lleves a juicio a tu siervo, pues ante ti nadie puede alegar inocencia.


Clamó entonces Moisés al Señor y dijo: —¿Qué voy a hacer con este pueblo? ¡Solo falta que me maten a pedradas!


Moisés se volvió al Señor y dijo: —¡Ay, Señor! ¿Por qué tratas tan mal a este pueblo? ¿Para esto me enviaste?


¡Ay de mí, madre mía, que me diste a luz como hombre de contiendas y disputas contra toda la nación! No he prestado ni me han prestado, pero todos me maldicen.


¿Por qué no cesa mi dolor? ¿Por qué es incurable mi herida? ¿Por qué se resiste a sanar? ¿Serás para mí un arroyo engañoso, de aguas no confiables?


»Ustedes han dicho: “Servir a Dios no vale la pena. ¿Qué ganamos con cumplir sus órdenes y vestirnos de luto delante del Señor de los Ejércitos?


Moisés escuchó que las familias del pueblo lloraban, cada una a la entrada de su tienda, con lo cual hacían que la ira del Señor se encendiera en extremo. Entonces, muy disgustado,


Si este es el trato que vas a darme, ¡me harás un favor si me quitas la vida! ¡Así me veré libre de mi desgracia!


Y como si fuera poco, cada día pesa sobre mí la preocupación por todas las iglesias.


¿Cómo puedo seguir ocupándome yo solo de todos los problemas, las cargas y los pleitos de ustedes?