Volvió la mirada hacia Sodoma y Gomorra, y hacia toda la llanura, y vio que de la tierra subía humo, como de un horno.
Joel 2:30 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 En el cielo y en la tierra mostraré prodigios: sangre, fuego y columnas de humo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo. Biblia Nueva Traducción Viviente Y haré maravillas en los cielos y en la tierra: sangre, fuego y columnas de humo. La Biblia Textual 3a Edicion Y haré prodigios en los cielos y en la tierra, Sangre y fuego, y columnas de humo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y daré prodigios en los cielos y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo. |
Volvió la mirada hacia Sodoma y Gomorra, y hacia toda la llanura, y vio que de la tierra subía humo, como de un horno.
¿Qué es eso que sube por el desierto semejante a una columna de humo, entre aromas de mirra e incienso, entre perfumes de mercaderes?
Por eso la tierra estará de luto y los altos cielos se oscurecerán, pues ya lo dije y no me retractaré; lo he decidido y no me volveré atrás».
»Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, »“se oscurecerá el sol y no brillará más la luna; las estrellas caerán del cielo y los cuerpos celestes serán sacudidos”.
Habrá grandes terremotos, hambre y epidemias en diferentes lugares, cosas espantosas y grandes señales del cielo.
Cuando los hombres de Hai miraron hacia atrás, vieron que subía de la ciudad una nube de humo. Entonces se dieron cuenta de que no podían huir en ninguna dirección, porque la gente de Josué que antes huía hacia el desierto ahora se lanzaba contra sus perseguidores.
Al ver el humo del fuego que la consume, exclamarán: «¿Qué otra ciudad podría compararse con esta gran ciudad?».
Cuando los reyes de la tierra que cometieron adulterio con ella y compartieron su lujo vean el humo del fuego que la consume, llorarán de dolor por ella.
El primero tocó su trompeta y fueron arrojados sobre la tierra granizo y fuego mezclados con sangre. Y quemó la tercera parte de la tierra, la tercera parte de los árboles y toda la hierba verde.
Los israelitas habían acordado con los que estaban emboscados que, cuando estos levantaran una gran nube de humo desde la ciudad,
Pero cuando la columna de humo comenzó a levantarse de la ciudad, los de Benjamín se dieron vuelta y vieron que el fuego de la ciudad entera subía al cielo.