Al tercer día, llegó a Siclag un hombre que venía del campamento de Saúl. En señal de duelo se presentó ante David con la ropa rasgada y la cabeza cubierta de ceniza, y se postró rostro en tierra.
2 Samuel 14:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Cuando aquella mujer de Tecoa se presentó ante el rey, hizo una reverencia y se postró rostro en tierra. —¡Ayúdeme, Su Majestad! —exclamó. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entró, pues, aquella mujer de Tecoa al rey, y postrándose en tierra sobre su rostro, hizo reverencia, y dijo: ¡Socorro, oh rey! Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando la mujer de Tecoa se acercó al rey, se inclinó rostro en tierra con profundo respeto y exclamó: —¡Oh rey, ayúdeme! Biblia Católica (Latinoamericana) La mujer de Tecoa fue donde el rey, se postró con el rostro en tierra y se puso a gritar: '¡Ayúdame, señor rey!' La Biblia Textual 3a Edicion Y la mujer de Tecoa habló al rey, y cayendo en tierra sobre su rostro, se postró y dijo: ¡Ayúdame, oh rey! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se presentó, pues, la mujer de Tecoa al rey y se postró rostro en tierra ante él, al tiempo que exclamaba: 'Auxíliame, ¡oh rey!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entró, pues, aquella mujer de Tecoa al rey, y postrándose en tierra sobre su rostro hizo reverencia, y dijo: Oh rey, salva. |
Al tercer día, llegó a Siclag un hombre que venía del campamento de Saúl. En señal de duelo se presentó ante David con la ropa rasgada y la cabeza cubierta de ceniza, y se postró rostro en tierra.
Postrándose rostro en tierra, Joab hizo una reverencia al rey y le dio las gracias, añadiendo: —Hoy sé que cuento con el favor de mi señor y rey, pues usted ha accedido a mi petición.
—¿Qué te pasa? —preguntó el rey. —Soy una pobre viuda —respondió ella—; mi esposo ha muerto.
Ajimaz llegó y saludó al rey postrándose rostro en tierra ante él y dijo: —¡Bendito sea el Señor su Dios, pues nos ha entregado a los que se habían rebelado en contra de mi señor el rey!
En cuanto el criado se fue, David salió de su escondite y luego se postró tres veces con su rostro en tierra. Enseguida se besaron y lloraron juntos, hasta que David se desahogó.
Cuando Abigaíl vio a David, se bajó rápidamente del asno y se postró ante él con su rostro en tierra.