2 Corintios 4:1 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Por esto, ya que por la misericordia de Dios tenemos este ministerio, no nos desanimamos. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, ya que Dios, en su misericordia, nos ha dado este nuevo camino, nunca nos damos por vencidos. Biblia Católica (Latinoamericana) Ese es nuestro ministerio, y como lo tenemos por gracia de Dios, no nos desanimamos. La Biblia Textual 3a Edicion Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio, según la misericordia que recibimos, no desmayamos; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por lo tanto, investidos por la misericordia [de Dios] de este ministerio, no perdemos el ánimo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos; |
pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; levantarán el vuelo como las águilas, correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán.
Tú dijiste: “¡Ay de mí! ¡El Señor añade angustia a mi dolor! Estoy agotado de tanto gemir y no encuentro descanso”.
Jesús contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar siempre, sin desanimarse.
Después de todo, ¿qué es Apolos? ¿Y qué es Pablo? Nada más que servidores por medio de los cuales ustedes llegaron a creer, según lo que el Señor asignó a cada uno.
En cuanto a las personas solteras, no tengo ningún mandato del Señor, pero doy mi opinión como quien por la misericordia del Señor es digno de confianza.
Él nos ha capacitado para ser servidores de un nuevo pacto, no el de la letra, sino el del Espíritu; porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.
Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día.
Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación.
No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos.
Así que les pido que no se desanimen a causa de lo que sufro por ustedes, ya que estos sufrimientos míos son para ustedes un honor.
Anteriormente, yo era un blasfemo, un perseguidor y un insolente; pero Dios tuvo misericordia de mí porque yo era un incrédulo y actuaba con ignorancia.
Así, pues, consideren a aquel que perseveró frente a tanta oposición por parte de los pecadores, para que no se cansen ni pierdan el ánimo.
Ustedes antes ni siquiera eran pueblo, pero ahora son pueblo de Dios; antes no habían recibido misericordia, pero ahora ya la han recibido.