Efesios 1:15 - Biblia Nueva Traducción Viviente Desde que me enteré de su profunda fe en el Señor Jesús y del amor que tienen por el pueblo de Dios en todas partes, Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, Biblia Católica (Latinoamericana) He sabido cómo ustedes viven en Cristo Jesús la fe y el amor para con todos los santos, quiero decir, para con los hermanos, La Biblia Textual 3a Edicion Por esto yo también, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y del° amor para con todos los santos, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, yo también, habiendo oído hablar de vuestra fe en el Señor Jesús y de vuestro amor hacia todo el pueblo santo, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por lo cual también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y amor para con todos los santos, Biblia Traducción en Lenguaje Actual Me he enterado de que ustedes confían mucho en el Señor Jesús y aman a todos los del pueblo de Dios. Por eso, y por lo que antes dije, |
He tenido un solo mensaje para los judíos y los griegos por igual: la necesidad de arrepentirse del pecado, de volver a Dios y de tener fe en nuestro Señor Jesús.
Ante todo les digo que, mediante Jesucristo, le doy gracias a mi Dios por todos ustedes, porque en todas partes del mundo se habla de la fe que tienen en él.
Pues, una vez que depositamos nuestra fe en Cristo Jesús, de nada sirve estar o no circuncidado. Lo importante es la fe que se expresa por medio del amor.
Yo, Pablo, elegido por la voluntad de Dios para ser apóstol de Cristo Jesús, escribo esta carta al pueblo santo de Dios en Éfeso, fieles seguidores de Cristo Jesús.
Espero que puedan comprender, como corresponde a todo el pueblo de Dios, cuán ancho, cuán largo, cuán alto y cuán profundo es su amor.
Al orar a nuestro Dios y Padre por ustedes, pensamos en el fiel trabajo que hacen, las acciones de amor que realizan y la constante esperanza que tienen a causa de nuestro Señor Jesucristo.
Pero no hace falta que les escribamos sobre la importancia de amarse mutuamente, pues Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a otros.
Amados hermanos, no podemos más que agradecerle a Dios por ustedes, porque su fe está floreciendo, y el amor de unos por otros, creciendo.
¡Oh, qué tan generoso y lleno de gracia fue el Señor! Me llenó de la fe y del amor que provienen de Cristo Jesús.
El propósito de mi instrucción es que todos los creyentes sean llenos del amor que brota de un corazón puro, de una conciencia limpia y de una fe sincera;
porque sigo oyendo de tu fe en el Señor Jesús y de tu amor por todo el pueblo de Dios.
Pues Dios no es injusto. No olvidará con cuánto esfuerzo han trabajado para él y cómo han demostrado su amor por él sirviendo a otros creyentes como todavía lo hacen.
Al obedecer la verdad, ustedes quedaron limpios de sus pecados, por eso ahora tienen que amarse unos a otros como hermanos, con amor sincero. Ámense profundamente de todo corazón.
Si alguien tiene suficiente dinero para vivir bien y ve a un hermano en necesidad pero no le muestra compasión, ¿cómo puede estar el amor de Dios en esa persona?
Y él nos ha dado el siguiente mandato: los que aman a Dios deben amar también a sus hermanos creyentes.