Toda la asamblea de Judá celebró, junto con los sacerdotes y los levitas, y también con toda la asamblea que había venido de Israel, incluidos los extranjeros de Israel y los que vivían en Judá.
Luego Salomón convocó a Jerusalén a los ancianos de Israel -todos los jefes de las tribus y los jefes de familia de los israelitas- para que trajeran el Arca del Pacto del Señor desde Sión, la Ciudad de David.
y el pueblo se reunió como uno solo en la plaza junto a la Puerta del Agua. Le dijeron a Esdras el escriba que sacara el Libro de la Ley de Moisés, que el Señor había ordenado seguir a Israel.
“Ve con Aarón y sus hijos, y toma sus vestidos sacerdotales, el aceite de la unción, el toro de la ofrenda por el pecado, dos carneros y la cesta de los panes sin levadura,
“Toma el bastón y haz que la gente se reúna a tu alrededor. Mientras miran, tú y tu hermano Aarón ordenarán a la roca y derramará agua. Traerán agua de la roca para que el pueblo y su ganado puedan beber”.