Ellos rechazan a las personas que el Señor rechaza y honran a los que siguen al Señor. Guardan y cumplen sus promesas, incluso cuando es difícil hacerlo. Ellos no cambian su manera de pensar.
Escuchen esto, descendientes de Jacob, llamados por el nombre de Israel, y que provienen del linaje de Judá. Escuchen, ustedes que juran por el nombre del Señor, o que invocan al Dios de Israel, pero no verdadera ni sinceramente.
Pero ahora han cambiado de parecer y me han deshonrado. Cada uno de ustedes recuperó a los esclavos y esclavas que habían liberado para que hicieran lo que quisieran. Los obligaron a volver a ser sus esclavos.
¿Realmente van a seguir robando, asesinando, cometiendo adulterio y mintiendo, quemando incienso a Baal y adorando a otros dioses de los que no saben nada,
El hijo de la mujer israelita maldijo el nombre del Señor. Así que lo llevaron ante Moisés. (Su madre se llamaba Selomit, hija de Dibri, de la tribu de Dan).
Puede que hayas encontrado una propiedad que alguien perdió, y mentiste e hiciste declaraciones falsas sobre ello, o has pecado de otras maneras en tales situaciones.
Entonces me dijo: “Esta es la maldición que caerá sobre todo el mundo. Cualquiera que roba será purgado de entre la sociedad, según un lado del rollo. Cualquiera que jura con engaño, será purgado de entre la Sociedad, según el otro lado del rollo”.
“Yo he enviado esta maldición y entrará a la casa del ladrón, y a la casa del que jura con mentiras en mi nombre, declara el Señor Todopoderoso. La maldición permanecerá en esa casa y destruirá tanto las vigas como los ladrillos”.
Yo vendré y los probaré. Estoy listo para ser testigo contra: los que cometen hechicería los que cometen adulterio dicen mentiras dicen falso testimonio engañan a sus empleados oprimen a las viudas y huérfanos abusan de los extranjeros y contra los que no me respetan, dice el Señor Todopoderoso.
Por encima de todo, amigos, no juren. No juren por el cielo, ni por la tierra, ni hagan ningún otro tipo de juramento. Simplemente digan sí, o no, para que no caigan en condenación.