Toda mujer pedirá a su vecina, así como a cualquier mujer que viva en su casa, joyas y ropa de plata y oro, y se las pondrá a sus hijos e hijas. De esta manera se llevarán la riqueza de los egipcios con ustedes”.
Así que todos los que quisieron, tanto hombres como mujeres, vinieron y presentaron su oro como ofrenda de agradecimiento al Señor, incluyendo broches, pendientes, anillos y collares, todo tipo de joyas de oro.