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Hechos 27:17 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

17 Después los marineros usaron cuerdas y con ellas trataron de sujetar el barco, para que no se rompiera. Todos tenían miedo de que el barco quedara atrapado en los depósitos de arena llamados Sirte. Bajaron las velas y dejaron que el viento nos llevara a donde quisiera.

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Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

17 Y una vez subido a bordo, usaron de refuerzos para ceñir la nave; y teniendo temor de dar en la Sirte, arriaron las velas y quedaron a la deriva.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

17 Después los marineros ataron cuerdas alrededor del casco del barco para reforzarlo. Tenían miedo de que el barco fuera llevado a los bancos de arena de Sirte, frente a la costa africana, así que bajaron el ancla flotante para disminuir la velocidad del barco y se dejaron llevar por el viento.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Una vez subido a bordo, hubo que asegurar el casco ciñéndolo por debajo con cables. Ante el peligro de encallar en las arenas de Sirte, soltaron el ancla flotante y nos dejamos arrastrar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

17 Después de izarlo, ciñeron con amarras la nave por debajo, y temiendo encallar° en la Sirte,° arriaron los aparejos° y se dejaban llevar a la deriva.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Izado éste, reforzaron el casco de la nave con maromas y, por miedo de encallar en la Sirte, echaron el ancla flotante y se dejaban ir así a la deriva.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

17 el cual subido a bordo, usaban de refuerzos, ciñendo la nave; y teniendo temor de que diesen en la Sirte, arriando velas, quedaron a la deriva.

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Hechos 27:17
5 Tagairtí Cros  

Al pasar cerca de una pequeña isla llamada Clauda, pudimos sujetar el bote salvavidas con gran dificultad.


Sin embargo, tenemos que llegar a alguna isla.


Tuvieron miedo de estrellarse contra una roca, entonces arrojaron al agua cuatro anclas en la parte trasera del barco y se pusieron a rogar que llegara la luz del día.


Cortaron las anclas y las dejaron caer en el mar, al mismo tiempo desataron las amarras de los timones, luego izaron a favor del viento la vela de la proa y se dirigieron a la playa.


Pero al pasar entre dos corrientes, el barco dio contra un banco de arena y encalló de frente, y por detrás empezó a ser destruido por la fuerza de las olas. El barco se hizo pedazos.


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