Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Salmos 59:11 - Biblia Martin Nieto

11 mi Dios viene a mi encuentro con su amor, me hará ver la derrota de mis enemigos.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

11 No los mates, para que mi pueblo no olvide; Dispérsalos con tu poder, y abátelos, Oh Jehová, escudo nuestro.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

11 No los mates, porque mi pueblo pronto olvida esa clase de lecciones; hazlos tambalear con tu poder y ponlos de rodillas, oh Señor, escudo nuestro.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

11 Oh Dios, ordena su masacre, pues tu pueblo no debe olvidarlo. Tú, tan valiente, persíguelos y mátalos, oh Señor, nuestro escudo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

11 ¡No los mates, no sea que mi pueblo olvide! ¡Dispérsalos con tu poder y humíllalos, oh Adonay, escudo nuestro!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 mi Dios viene a mi encuentro con su gracia, él me dará a ver de mis opresores la derrota.

Féach an chaibidil Cóip




Salmos 59:11
22 Tagairtí Cros  

¡Con una mirada al soberbio derriba, aplasta a los criminales donde estén!


que dispersaría a sus descendientes por todos los países y los esparciría entre todos los gentiles.


El Señor está conmigo, él es mi apoyo, yo veré derrotado a mi enemigo.


cuántos los que dicen de mi vida: 'Ya ni Dios lo salva'.


nos haces retroceder ante nuestros adversarios, y nuestros enemigos nos saquean a su gusto;


prefieres el mal en vez del bien y el engaño en vez de la justicia;


Un día en tus atrios vale más que mil: prefiero estar en el umbral de la casa de mi Dios a vivir en la casa del malvado.


Señor, Dios omnipotente, escucha mi plegaria; atiéndeme, oh Dios de Jacob;


pues los vivos saben que han de morir, pero los muertos no saben nada y ya no reciben salario, porque su recuerdo está en el olvido.


A vosotros os dispersaré entre las naciones y os perseguiré con la espada desenvainada. Vuestra tierra será una desolación y vuestras ciudades un montón de ruinas.


Entonces los que estén en Judea que huyan a los montes, los que estén dentro de la ciudad que se alejen y los que estén en el campo que no entren en la ciudad.


El Señor te dispersará entre todos los pueblos, de uno a otro extremo de la tierra, y allí serviréis a otros dioses de madera y de piedra desconocidos de ti y de tus padres.


El Señor os dispersará entre los pueblos, y sólo quedará de vosotros un pequeño número en medio de las naciones entre las que el Señor os arrojará.


Pon atención, y no te olvides de lo que has visto con tus ojos ni lo dejes escapar nunca de tu corazón. Antes bien, enséñaselo a tus hijos y a tus nietos.


En aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la encontrarán; desearán morir, pero la muerte huirá de ellos.


Y los hombres de David le dijeron: 'Mira, hoy es el día del que te dijo el Señor: Yo pongo a tu enemigo en tu mano; trátale como bien te parezca'. David se levantó y sigilosamente cortó la orla del manto de Saúl.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí