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Jeremías 51:27 - Biblia Martin Nieto

27 Alzad bandera por la tierra, tocad la trompeta entre las naciones, preparad pueblos contra ella, convocad contra ella a los reinos de Ararat, Miní y Asquenaz; enviad contra ella el oficial de reclutamiento, lanzad los caballos como nube de langostas erizadas.

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Biblia Reina Valera 1960

27 Alzad bandera en la tierra, tocad trompeta en las naciones, preparad pueblos contra ella; juntad contra ella los reinos de Ararat, de Mini y de Askenaz; señalad contra ella capitán, haced subir caballos como langostas erizadas.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

27 Levanten una bandera de señales a las naciones. ¡Hagan sonar el grito de guerra! Movilicen a todas contra Babilonia. ¡Prepárenlas para luchar contra ella! Convoquen a los ejércitos de Ararat, Mini y Askenaz. ¡Nombren a un comandante y traigan una multitud de caballos como una nube de langostas!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

27 ¡Agiten banderas por el mundo entero y toquen el clarín en todas las naciones! Preparen los países para atacarla, citen a los reinos de Ararat, Minni y Askenaz para que marchen contra ella; que entre en acción el oficial de reclutamiento. Lancen a la carga la caballería como una nube de langostas rabiosas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

27 ¡Alzad estandarte en la tierra! ¡Tocad trompeta entre las naciones, convocando a la guerra santa! ¡Convocad contra ella los reinos de Ararat, de Mini y de Askenaz! ¡Designad contra ella un capitán! ¡Avancen los corceles cual langostas erizadas!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

27 Izad bandera en la tierra, tocad trompeta en las naciones, convocadlas para la guerra santa contra ella, convocad contra ella a los reinos -Ararat, Minní y Asquenaz-, nombrad contra ella reclutadores, lanzad caballos como hirsutas langostas.

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Jeremías 51:27
24 Tagairtí Cros  

Hijos de Gómer: Asquenaz, Rifat y Togarma.


y el día diecisiete del séptimo mes el arca quedó anclada sobre los montes de Ararat.


Y cuando estaba haciendo oración en el templo de su dios Nisroc, sus hijos Adremélec y Saréser lo mataron a espada y huyeron a Ararat. Le sucedió en el trono su hijo Asaradón.


Hijos de Gómer: Asquenaz, Rifat y Togarma.


Habitantes todos del orbe, pobladores de la tierra, cuando se alce la señal en los montes, mirad; cuando suene la trompeta, escuchad.


Y un día, mientras estaba adorando en el templo de Misroc, su dios, sus hijos Adramélec y Saréser le mataron con la espada. Huyeron éstos después al país de Ararat, y Asaradón, hijo suyo, le sucedió en el trono.


Ellas serán subyugadas por naciones poderosas y reyes poderosos, y yo les pagaré según sus actos y según las obras de sus manos'.


Talan su bosque - dice el Señor- porque son innumerables, multiplicados más que la langosta. Nadie puede contarlos.


¡Anunciadlo entre las naciones, publicadlo, izad una señal, pregonadlo, no ocultéis nada, gritad: Ha sido tomada Babilonia, confundido Bel, Marduc vencido; avergonzadas sus imágenes, destruidos sus ídolos!


Pues desde el norte avanza contra ella un pueblo que convertirá en un desierto su tierra, y nadie más habitará allí; hombres y bestias huyen, desaparecen.


Pues ved que yo suscito y lanzo contra Babilonia una coalición de grandes pueblos, que llegan del norte. Caerán sobre ella, y por allí será conquistada. Sus flechas, como de expertos guerreros, no caerán en el vacío.


Contra los muros de Babilonia izad bandera, reforzad la guardia, apostad centinelas, tended emboscadas, pues el Señor tenía un proyecto y ha ejecutado lo que había anunciado contra los habitantes de Babilonia.


El Señor omnipotente ha jurado por sí mismo: Yo te inundaré de hombres como de langostas, y levantarán sobre ti el grito de triunfo.


Preparad naciones para atacarla, a los reyes de Media, a sus gobernadores, a todos sus sátrapas y a todo el territorio de su imperio.


¡Huid, hijos de Benjamín, lejos de Jerusalén! ¡Tocad la trompeta en Técoa! ¡Sobre Betqueren izad una señal! Pues por el norte asoma la desgracia, un inmenso desastre.


¿Sonará la trompeta en la ciudad sin que el pueblo se alarme? ¿Sucederá en la ciudad una desgracia sin que el Señor la haya causado?


El Señor reunirá a todas las naciones para luchar contra Jerusalén. La ciudad será tomada, las casas serán saqueadas y las mujeres violadas. La mitad de la ciudad saldrá para el destierro, pero el resto del pueblo no será exterminado de la ciudad.


Subían con sus rebaños y tiendas como una nube de langosta y lo destruían todo; sus camellos eran innumerables.


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