Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Jeremías 30:17 - Biblia Martin Nieto

17 Sí, yo te devolveré la salud, yo curaré tus heridas -dice el Señor-, porque te han llamado la Abandonada, Sión, de quien nadie se cuida.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

17 Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

17 Te devolveré la salud y sanaré tus heridas —dice el Señor—, aunque te llamen desechada, es decir, “Jerusalén, de quien nadie se interesa”».

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Ya que a ti te llamaban La Abandonada, nuestra presa, de quien nadie se preocupa, yo voy a devolver el vigor a tu cuerpo y voy a sanar tus llagas, dice Yavé.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

17 Y Yo haré curar tus llagas, Y sanaré tus heridas, dice YHVH, Porque te llamaron la repudiada, diciendo: ¡Ésta es Sión, de la quien nadie cuida!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Pero voy a hacer cicatrizar tu herida y voy a curarte de tus llagas -oráculo de Yahveh-, porque te llamaron 'La Desechada', Sión, la que no tiene quien la cuide.

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 30:17
36 Tagairtí Cros  

Porque él hiere y después sana la herida; llaga, y su misma mano cura.


Él te perdona todos tus delitos y te cura de tus enfermedades;


Envió su palabra y los curó, los libró del sepulcro.


de todos los que dicen: 'La lengua es nuestra fuerza, los labios nuestras armas, ¿quién podrá dominarnos?'.


Cuando estoy deprimido, tú sabes dónde voy. En mi camino me han escondido un lazo.


y conforta mi alma; me guía por los senderos de justicia, por amor a su nombre;


Les dijo: 'Si verdaderamente escuchas la voz del Señor, tu Dios, y haces lo que es recto a sus ojos, prestas oído a sus mandatos y observas todos sus estatutos, no enviaré sobre ti ninguna de las plagas con que castigué a los egipcios, porque yo soy el Señor, tu salvador'.


Izará una enseña para las naciones y reunirá a los dispersos de Israel; a los prófugos de Judá convocará de los cuatro extremos de la tierra;


Entonces la luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol será siete veces más fuerte, como la luz de siete días, el día en que el Señor vende la herida de su pueblo y cure la llaga de sus golpes.


No habrá habitante que diga: 'Estoy enfermo'; y el pueblo que vive en Jerusalén será perdonado de sus culpas.


Sí, como a una mujer abandonada y desolada te ha requerido el Señor. A la esposa tomada en la juventud, ¿se la puede rechazar? - dice tu Dios-.


Esto dice el Señor Dios, que reúne a los dispersos de Israel: Todavía juntaré otros a los que están ya reunidos.


Yo he visto sus caminos, pero le curaré y le aliviaré; le colmaré de consuelos a él y a los que lloran;


haré brotar la alabanza en sus labios. ¡Paz al que está lejos, paz al que está cerca - dice el Señor-; yo le curaré!


Entonces surgirá tu luz como la aurora y tus heridas curarán en seguida; tu justicia marchará ante ti y tras de ti la gloria del Señor.


No serás ya la abandonada, la maldecida de los viandantes; yo haré de ti una gloria eterna, una delicia de todas las generaciones.


Pero ahora mi tienda está asolada, cortadas todas mis cuerdas. Mis hijos me han abandonado, han desaparecido. No queda ya quien vuelva a levantar mi tienda, a desplegar mis toldos.


Cúrame, Señor, y quedaré curado; sálvame y seré salvo, porque tú eres mi gloria.


Volved, hijos rebeldes, yo curaré vuestras rebeldías. 'Aquí estamos, a ti venimos, porque tú eres el Señor, nuestro Dios.


Nadie se cuida de tu dolencia, no hay remedio que te pueda curar.


¿No te has fijado en lo que dicen estas gentes: 'Las dos familias que el Señor había escogido han sido desechadas'? Así desprecian a mi pueblo, que para ellos ya no es una nación.


Yo les devolveré la salud, los curaré y sanaré y les haré ver abundancia de paz y seguridad.


¿No queda bálsamo en Galaad? ¿No hay allí ningún médico? ¿Por qué, pues, no ha adelantado la curación de la hija de mi pueblo?


Al verte se frotan las manos todos los transeúntes; silban y menean la cabeza ante la hija de Jerusalén, diciendo: '¿Es ésta la ciudad más hermosa, la delicia de toda la tierra?'.


Buscaré la oveja perdida y haré volver a la descarriada; vendaré a la herida, fortaleceré a la flaca, cuidaré de la gorda y robusta; las apacentaré como es justo.


Y sabrás que yo, el Señor, he oído todos los ultrajes que lanzabas contra los montes de Israel cuando decías: Están devastados, nos han sido dados como presa.


Y en las naciones donde llegaron profanaron mi santo nombre, al decirse de ellos: Son el pueblo del Señor y han tenido que abandonar su país.


Y yo enseñaba a Efraín a caminar, lo llevaba en brazos; pero no han comprendido que yo cuidaba de ellos.


Venid, volvamos al Señor: él ha desgarrado, él nos curará; él ha herido, él nos vendará.


él que llevó en su propio cuerpo nuestros pecados sobre la cruz para que, muertos para el pecado, vivamos para la justicia: por sus heridas hemos sido curados.


En medio de la plaza de la ciudad, y a un lado y otro del río, hay árboles de la vida, que dan doce frutos al año, una vez al mes. Las hojas de los árboles sirven para curar a las naciones.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí