Isaías 27:8 - Biblia Martin Nieto

⁸ Lo ha castigado con la dispersión, con el destierro; lo ha aventado con la fuerza de su soplo, como en día de viento solano.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Con medida lo castigarás en sus vástagos. Él los remueve con su recio viento en el día del aire solano.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ No, pero desterró a Israel para que rindiera cuentas; quedó desterrado de su tierra, como si hubiera sido arrasado por una tormenta del oriente.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Lo castigó, echándolo de su casa o desterrándolo, y lo despidió de un soplido tan fuerte como viento del este.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Antes, al enviarla lejos, contendiste con ella con moderación; Con su viento recio la apartó en día de solano.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Dispersándolo, expulsándolo, lo has castigado. Lo arrojó con su potente soplo en un día de solano.

Isaías 27:8 Tagairtí Cros

Job 23:6

¿Acaso con alarde de fuerza disputaría conmigo? No, sólo tendría que prestarme atención.

Salmos 103:14

él sabe de qué pasta estamos hechos, se acuerda de que no somos más que polvo.

Salmos 103:9

no está siempre acusando ni guarda rencor eternamente;

Salmos 38:1

Salmo de David. Conmemorativo

Salmos 6:1

Al maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. En octava. Salmo de David

Salmos 76:10

cuando Dios se levanta para hacer justicia, para liberar a todos los oprimidos de la tierra.

Salmos 78:38

Él, el misericordioso, en vez de destruirlos, perdonaba sus faltas; muchas veces su cólera contuvo y no dejó correr todo su enojo;

Isaías 1:5

¿Para qué golpearos todavía, si os seguís rebelando? Enferma está toda la cabeza, el corazón entero dolorido.

Isaías 10:12

Cuando el Señor haya concluido toda su obra en el monte Sión y en Jerusalén, castigará la altivez del corazón del rey de Asiria y la arrogancia de sus ojos altaneros.

Isaías 50:1

Esto dice el Señor: ¿Dónde está el acta de divorcio por la que yo he despedido a vuestra madre? O ¿cuál es mi acreedor a quien yo os haya vendido? Por vuestras culpas fuisteis vendidos, por vuestros pecados fue despedida vuestra madre.

Isaías 54:7

Sólo por un momento te había abandonado, pero con inmensa piedad te recojo de nuevo.

Isaías 57:16

Porque no quiero discutir eternamente y estar por siempre airado, pues ante mí sucumbiría el espíritu y las almas que yo he creado.

Isaías 64:5

Todos nosotros éramos inmundicias, y todas nuestras obras buenas como un lienzo manchado. Todos hemos caído como hojas, y nuestras iniquidades nos barren como el viento.

Jeremías 10:24

Castígame, Señor, mas con justa medida, y no según tu cólera, no sea que me aniquiles.

Jeremías 30:11

Porque yo estoy contigo -dice el Señor- para salvarte. Aniquilaré a todas las naciones entre las que te he dispersado. A ti no te aniquilaré; sólo te castigaré como mereces y no te dejaré pasar nada.

Jeremías 4:11

En aquel tiempo se dirá a este pueblo y a Jerusalén: Un viento ardiente sopla del desierto contra la hija de mi pueblo, y no para aventar ni para limpiar.

Jeremías 4:27

Sí, así habla el Señor: Todo el país será devastado, yo llevaré a cabo un total exterminio.

Jeremías 46:28

No, no temas, siervo mío Jacob -dice el Señor-, porque yo estoy contigo. Aniquilaré a todas las naciones donde te he dispersado; pero a ti no te exterminaré, aunque te castigaré como mereces y no te dejaré pasar nada.

Lamentaciones 3:31

Pues el Señor no rechaza para siempre.

Lamentaciones 3:32

Y cuando castiga, tiene aún compasión, según su gran bondad.

Ezequiel 19:12

Mas fue arrancada con furor, derribada en tierra, y el viento del este agostó sus frutos; quedó rota, su rama robusta se secó y lo devoró todo el fuego.

Oseas 13:15

Efraín es fecundo entre las cañas; pero llegará el solano, el viento del Señor se alzará del desierto, secará sus manantiales, agotará sus fuentes y se llevará todos sus tesoros, sus objetos preciosos.

Oseas 4:1

Israelitas, escuchad la palabra del Señor: El Señor ha entablado un pleito con los habitantes del país. No existe ya fidelidad ni amor del prójimo, ni conocimiento de Dios en el país,

1 Corintios 10:13

No os ha llegado ninguna prueba insuperable. Dios es fiel y no permitirá que seáis sometidos a pruebas superiores a vuestras fuerzas; ante la prueba os dará fuerza para superarla.

1 Pedro 1:6

Por eso estáis alegres aunque de momento os veáis obligados a sufrir diversas pruebas,