Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





2 Crónicas 7:16 - Biblia Martin Nieto

16 Yo he elegido y consagrado este templo para que resida en él mi nombre por siempre y para que en él estén siempre fijos mis ojos y mi corazón.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

16 porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que esté en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Pues he elegido este templo y lo he apartado para que sea santo, un lugar donde mi nombre será honrado para siempre. Lo vigilaré sin cesar, porque es muy preciado a mi corazón.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 pues ahora he escogido y santificado esta Casa, para que en ella permanezca mi Nombre para siempre. Allí estarán mis ojos y mi corazón todos los días.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

16 porque ahora he escogido y santificado esta Casa, para que mi Nombre esté en ella para siempre, y mis ojos y mi corazón estén allí todos los días.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 pues ahora he elegido y santificado este templo para que mi nombre more en él por siempre, y mis ojos y mi corazón estarán en él todos los días.

Féach an chaibidil Cóip




2 Crónicas 7:16
22 Tagairtí Cros  

Desde el día que saqué a mi pueblo de Egipto, no he escogido ninguna ciudad de entre las tribus de Israel para que se me construyera en ella un templo a mi nombre, sino que elegí a David para que estuviese al frente de mi pueblo Israel.


Cuando se cierre el cielo y no haya lluvia por haber pecado contra ti, si rezan en este lugar, te confiesan su pecado y se arrepienten a causa de tu castigo,


Cuando tu pueblo salga a la guerra contra sus enemigos por el camino que tú les hayas señalado, si rezan al Señor vueltos hacia la ciudad que tú has elegido y hacia el templo que yo he construido a tu nombre,


si se convierten a ti con todo su corazón y con toda su alma en la tierra de su cautividad, a la que han sido deportados; si rezan vueltos hacia la tierra que diste a sus padres, hacia la ciudad que tú has elegido y hacia el templo que yo he construido a tu nombre,


y le dijo: 'He escuchado la oración y súplica que me has hecho; he santificado este templo que has construido para que resida en él mi nombre por siempre y para que en él estén siempre fijos mis ojos y mi corazón.


Construyó también altares en el templo del Señor, del que el Señor había dicho: 'Pondré en Jerusalén mi nombre'.


No seáis de cabeza dura como vuestros padres. Tended vuestras manos al Señor y venid al santuario que él ha santificado para siempre. Servid al Señor, Dios vuestro, y el furor de su ira se apartará de vosotros.


Ten tus ojos noche y día fijos sobre este templo, sobre este lugar que has hecho morada de tu nombre. Escucha la plegaria que tu siervo haga en este lugar.


se le apareció el Señor de noche y le dijo: 'He escuchado tu oración y he elegido para mí este lugar como templo para mis sacrificios.


En adelante mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos a las plegarias que se hagan en este lugar.


En cuanto a ti, si andas en mi presencia como anduvo tu padre David, si cumples todo lo que te mande, si guardas mis leyes y mandamientos,


Porque el Señor ha escogido a Sión, la ha elegido para su residencia:


'Éste será siempre mi lugar de reposo, aquí residiré, aquí me gusta estar.


El ángel del Señor dijo a Satán: 'Que el Señor te reprima, Satán; que el Señor, que eligió a Jerusalén, te reprima. ¿No es éste como un tizón sacado del fuego?


Y se oyó una voz del cielo: 'Éste es mi hijo amado, mi predilecto'.


Si el lugar elegido por el Señor, tu Dios, para hacer habitar allí su nombre se encuentra distante, podrás matar del ganado mayor o menor que el Señor te haya dado, según lo que te he prescrito, y comer dentro de tu residencia lo que te apetezca.


En presencia del Señor, tu Dios, en el lugar elegido por él para hacer habitar su nombre, allí te regocijarás tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita, el extranjero, el huérfano y la viuda que viven en tu ciudad.


Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la divinidad,


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí