Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Mateo 13:15 - Nueva Biblia Española (1975)

15 Porque está entorpecida la mente de este pueblo; son duros de oído, han cerrado para no ver con los ojos los ojos ni oír con los oídos ni entender con la mente ni convertirse ni que yo los cure. (Is 6,9-10) '

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

15 Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, Y con los oídos oyen pesadamente, Y han cerrado sus ojos; Para que no vean con los ojos, Y oigan con los oídos, Y con el corazón entiendan, Y se conviertan, Y yo los sane.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

15 Pues el corazón de este pueblo está endurecido, y sus oídos no pueden oír, y han cerrado los ojos, así que sus ojos no pueden ver, y sus oídos no pueden oír, y su corazón no puede entender, y no pueden volver a mí para que yo los sane” .

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

15 Este es un pueblo de conciencia endurecida. Sus oídos no saben escuchar, sus ojos están cerrados. No quieren ver con sus ojos, ni oír con sus oídos y comprender con su corazón... Pero con eso habría conversión y yo los sanaría.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

15 Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado,° Y con los oídos oyen pesadamente,° Y han cerrado sus ojos. No sea que vean con los ojos, Y oigan con los oídos, Y entiendan con el corazón, Y se conviertan, y Yo° los sane.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Porque el corazón de este pueblo se ha embotado, con sus oídos pesadamente oyeron, y cerraron sus ojos; no sea que vean con sus ojos y oigan con sus oídos y entiendan con su corazón y se conviertan, y que yo los sane.

Féach an chaibidil Cóip




Mateo 13:15
25 Tagairtí Cros  

tienen el corazón espeso como grasa, pero mi delicia es tu voluntad;


Quien guiña el ojo medita engaños, quien frunce los labios ya ha hecho el mal.


Se apacienta de ceniza, una mente ilusa lo extravía, no es capaz de liberarse diciendo: ¿No es un engaño lo que tengo en mi diestra?


Yo vi. sus andanzas, pero lo curaré, lo guiaré, lo pagaré con consuelos;


Embota el corazón de ese pueblo, endurece su oído, ciega sus ojos: que sus ojos no vean, que sus oídos no oigan, que su corazón no entienda, que no se convierta y sane.


Sáname, Señor, y quedaré sano; sálvame, y quedaré a salvo; para ti es mi alabanza.


Nada más falso y enconado que el corazón: ¿quién lo entenderá?


Vuelvan, hijos apóstatas, y los curaré de su apostasía. Aquí estamos, hemos venido a ti, porque tú, Señor, eres nuestro Dios.


Yo mismo le traeré restablecimiento y curación, y les revelaré un rebose de paz y de fidelidad.


Curaré su apostasía, los querré sin que lo merezcan, mi cólera ya se ha apartado de ellos.


Pero no hicieron caso, me dieron la espalda rebelándose, se taparon los oídos para no oír.


Pero a los que respetan mi nombre los alumbrará el sol de la justicia que cura con sus alas. Saldrán saltando como terneros del establo,


así, por más que miran, no ven, por más que oyen, no entienden, a menos que' se conviertan y se les perdonen. (Is 6,9-10)


¡Si también tú comprendieras en este día lo que lleva a la paz! Pero no, no tienes ojos para verlo.


porque está oscurecida la mente de este pueblo. Son duros de oído, han cerrado los para no ver con los ojos, ojos ni oír con los oídos, ni entender con la mente, ni convertirse para que yo los cure.


Por tanto, arrepiéntanse y conviértanse para que se borren sus pecados;


Dando un grito estentóreo, se taparon los oídos y, todos a una, se echaron sobre él;


se harán sordos ala verdad y darán oídos a las fábulas.


De eso nos queda mucho por decir y es difícil explicarlo, porque se han vuelto ustedes indolentes para escuchar.


A mitad de la calle de la ciudad, a cada lado del río, crecía un árbol de la vida': da doce cosechas, una cada mes del año, y las hojas del árbol sirven de medicina a las naciones.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí