Génesis 4:11 - Nueva Biblia Española (1975)

¹¹ Por eso te maldice esa tierra, que ha abierto sus fauces para recibir de tus manos la sangre de tu hermano.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹¹ Ahora, pues, maldito seas tú de la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹¹ Ahora eres maldito y serás expulsado de la tierra que se ha tragado la sangre de tu hermano.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹¹ En adelante serás maldito, y vivirás lejos de este suelo fértil que se ha abierto para recibir la sangre de tu hermano, que tu mano ha derramado.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹¹ Y ahora, ¡maldito seas tú desde esa tierra, la cual ensanchó su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹¹ Ahora, pues, eres maldecido por la tierra, que ha abierto sus fauces para recibir de tu mano la sangre de tu hermano.

Génesis 4:11 Tagairtí Cros

Génesis 3:14

El Señor Dios dijo a la serpiente: Por haber hecho eso, maldita tú entre todos los animales domésticos y todas las fieras salvajes; te arrastrarás sobre el vientre y comerás polvo toda tu vida;

Génesis 4:14

Mi culpa es grave y me angustia. Si hoy me haces extranjero en esta tierra, tendré que ocultarme de ti, andando errante y perdido por el mundo; el que tropiece conmigo me matará.

Génesis 5:29

y lo llamó Noé, pues dijo: 'Alivió nuestras tareas y trabajos en la tierra que el Señor ha maldecido'.

Job 16:18

¡Tierra, no cubras mi sangre; tumba, no encierres mi demanda de justicia!

Isaías 26:21

Porque el Señor va a salir de su morada para castigar la culpa de los habitantes de la tierra: la tierra descubrirá la sangre derramada y ya no ocultará a los asesinados en ella.

Gálatas 3:10

Miren: los que se apoyan en la observancia de la Ley llevan encima una maldición, porque dice la Escritura: 'Maldito el que no se atiene a todo lo escrito en el libro de la ley y lo cumple'

Apocalipsis 12:16

pero la tierra salió en ayuda de la mujer, abrió su boca y se bebió el río salido de la boca de la serpiente.