Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Génesis 19:21 - Nueva Biblia Española (1975)

21 Le contestó: Accedo a lo que pides: no arrasaré esa ciudad que dices.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

21 Y le respondió: He aquí he recibido también tu súplica sobre esto, y no destruiré la ciudad de que has hablado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

21 —Está bien —dijo el ángel—, concederé tu petición. No destruiré la pequeña aldea.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

21 El otro respondió: 'También este favor te lo concedo, y no destruiré ese pueblo del que has hablado.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

21 Y le respondió: He aquí, también sobre esto he aceptado tu ruego.° No derrumbaré la ciudad de la cual has hablado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

21 Él contestó: 'Bien, también te concedo este favor y no destruiré la ciudad de la que hablas.

Féach an chaibidil Cóip




Génesis 19:21
16 Tagairtí Cros  

Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y servirá de bendición.


Supongamos que hay en la ciudad cincuenta inocentes, ¿los destruirás en vez de perdonar al lugar por los cincuenta inocentes que hay en él?


Mira, ahí cerca hay una ciudad pequeña donde puedo refugiarme y escapar del peligro. Como la ciudad es pequeña, salvaré allí la vida.


Aprisa, ponte a salvo allí, pues no puedo hacer nada hasta que llegues. Por eso la ciudad se llama La Pequeña.


¿Por que te enfureces y andas cabizbajo? Cierto, si obraras bien, seguro que andarías con la cabeza alta; pero si no obras bien, el pecado acecha a la puerta. Y aunque viene por ti, tú puedes dominarlo.


y se vuelva a las súplicas de los indefensos, y no desprecie sus peticiones,


Satisface los deseos de sus fieles, escucha sus gritos de auxilio y los salva;


Los ojos del Señor no se apartan de los honrados, sus oídos atienden a sus gritos de auxilio;


El Señor le respondió: También esa petición te la concedo, porque gozas de mi favor y te trato personalmente.


Así responde el Señor a este pueblo: Les gusta mover las piernas, no las escatiman, pero el Señor no se complace en ellos; ahora recuerda sus culpas y castigará sus pecados.


La caña rajada no la quebrará, la mecha humeante no la apagará hasta que haga triunfar el derecho.


Les digo que acabará por levantarse y darle lo que necesita, si no por ser amigos, al menos para librarse de su importunidad.


Por eso tenía que parecerse en todo a sus hermanos, para ser sumo sacerdote compasivo y fidedigno en lo que toca a Dios y expiar así los pecados del pueblo.


David le aceptó lo que ella le traía, y le dijo: Vete en paz a tu casa. Ya ves que te hago caso y te he guardado consideración.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí