Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Éxodo 9:7 - Nueva Biblia Española (1975)

7 El Faraón mandó averiguar, y del ganado de los israelitas no había muerto ni una res. Pero el Faraón se puso terco y no dejó salir al pueblo.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

7 Entonces Faraón envió, y he aquí que del ganado de los hijos de Israel no había muerto uno. Mas el corazón de Faraón se endureció, y no dejó ir al pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Entonces el faraón envió a sus funcionarios a investigar, ¡y comprobaron que los israelitas no habían perdido ni uno de sus animales! Pero aun así, el corazón del faraón siguió obstinado, y una vez más se negó a dejar salir al pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Faraón se informó al respecto: ¡ninguno había muerto de los que pertenecían a Israel! Pero siguió en su ceguera y no dejó salir al pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

7 Y envió Faraón, y he aquí que del ganado de los hijos de Israel no había perecido ni uno. Aun así, el corazón de Faraón se endureció y no dejó partir al pueblo.

Féach an chaibidil Cóip




Éxodo 9:7
11 Tagairtí Cros  

¿Quién, fuerte o sabio, le resiste y queda ileso?


Yo sé que el rey de Egipto no los dejará marchar si no es a la fuerza;


Y el Faraón se puso terco y no les hizo caso, como había anunciado el Señor.


El Señor dijo a Moisés: El Faraón se ha puesto terco y se niega a dejar marchar al pueblo.


Pero el Faraón se puso terco también esta vez y no dejó salir al pueblo.


Pero el Señor hizo que el Faraón se empeñara en no hacerles caso, como lo había anunciado el Señor.


El Señor dijo a Moisés y a Aarón: Tomen un puñado de hollín del horno y que Moisés lo aviente hacia el cielo a la vista del Faraón;


El hombre reacio a las reprensiones fracasará de improviso y sin remedio.


Porque sé que eres obstinado, que tu cerviz es un tendón de hierro y tu frente es de bronce;


Pero se ensoberbeció y creció su arrogancia; entonces lo derribaron del trono real y lo despojaron de su dignidad.


En conclusión: Dios tiene misericordia de quien quiere y deja endurecerse a quien quiere.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí