Esdras 4:3 - Nueva Biblia Española (1975)3 Zorobabel, Josué y los demás cabezas de familia les respondieron: No edificaremos juntos el templo de nuestro Dios. Lo haremos nosotros solos, como ha mandado Ciro de Persia. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19603 Zorobabel, Jesúa, y los demás jefes de casas paternas de Israel dijeron: No nos conviene edificar con vosotros casa a nuestro Dios, sino que nosotros solos la edificaremos a Jehová Dios de Israel, como nos mandó el rey Ciro, rey de Persia. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente3 Zorobabel, Jesúa y los otros líderes de Israel respondieron: —De ninguna manera pueden tomar parte en esta obra. Nosotros solos construiremos el templo para el Señor, Dios de Israel, tal como nos ordenó Ciro, rey de Persia. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)3 Zorobabel, Josué y los demás jefes de familia de Israel les respondieron: '¡No tenemos que construir junto con ustedes un Templo para nuestro Dios. Nosotros solos construiremos para Yavé Dios de Israel, tal como nos lo ordenó Ciro, rey de Persia!' Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion3 Pero Zorobabel, Jesúa, y los demás cabezas paternas de Israel les respondieron: Nada tenéis que ver con nosotros° para que edifiquéis Casa a nuestro Dios, sino que nosotros solos construiremos para YHVH, Dios de Israel, como nos ordenó Ciro rey de Persia. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19753 Pero Zorobabel, Josué y los demás jefes de familia de Israel les respondieron: 'No podéis colaborar con nosotros para edificar un templo a nuestro Dios, sino que hemos de ser nosotros solos quienes lo edifiquemos en honor de Yahveh, Dios de Israel, pues así lo dispuso Ciro, rey de Persia '. Féach an chaibidil |
A los dos años de haber llegado al templo de Jerusalén, el mes de abril, Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Yosadac, sus demás parientes sacerdotes y levitas, y tocios los que habían vuelto a Jerusalén del cautiverio comenzaron la obra del templo, poniendo al frente de ella a los levitas mayores de veinte años.