Son como árboles junto a las riberas de un río, que no dejan de dar delicioso fruto cada estación. Sus hojas nunca se marchitan y todo lo que hacen prospera.
Proverbios 12:12 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Los malos deseos son la trampa de los malvados, pero la raíz de los justos florecerá. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Codicia el impío la red de los malvados; Mas la raíz de los justos dará fruto. Biblia Nueva Traducción Viviente Cada ladrón envidia el botín del otro, pero los justos están bien arraigados y dan su propio fruto. Biblia Católica (Latinoamericana) Las ambiciones del malo le acarrean desgracias; el justo, en cambio, es un árbol que fructifica. La Biblia Textual 3a Edicion El impío codicia el botín de los malvados, Pero la raíz de los justos da fruto.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 El deseo del malvado es una red de males, la estirpe de los justos permanece firme. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Desea el impío la red de los malos; mas la raíz de los justos da fruto. |
Son como árboles junto a las riberas de un río, que no dejan de dar delicioso fruto cada estación. Sus hojas nunca se marchitan y todo lo que hacen prospera.
Como leones, se agazapan silenciosos en espera de lanzarse sobre los indefensos. Como cazadores, hacen caer a sus víctimas en sus trampas.
Las naciones caen en las trampas que cavaron para otros; la trampa que pusieron los ha atrapado.
La riqueza del rico es su ciudad fortificada; la pobreza del pobre es su ruina.
El malvado sólo piensa en hacer mal; no tiene misericordia de su vecino.
Vendrá el tiempo en que Israel echará raíces, retoñará y florecerá llenando toda la tierra con sus frutos».
Y los que han quedado en Judá arraigarán de nuevo en su suelo, florecerán y se multiplicarán,
Ya no hay gente honrada en este país. ¡Ya no queda en este país ni una sola persona que practique la justicia! Son todas homicidas, que se vuelven contra sus propios familiares. ¡Unos a otros buscan hacerse daño!
Ustedes no me escogieron a mí, sino que yo los escogí a ustedes, y los he mandado para que vayan y den fruto, un fruto que dure para siempre. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.
»Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que está unido a mí, como yo estoy unido a él, dará mucho fruto. Si están separados de mí no pueden hacer nada.
Mas ahora están libres del pecado y son esclavos de Dios. Esto les trae como beneficio la santidad y como fin la vida eterna.