El Señor prefiere que practiquemos la justicia y la honradez en lugar de los sacrificios.
Mateo 23:23 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 »¡Ay de ustedes, fariseos y escribas hipócritas! Porque diezman hasta la última hojilla de menta del jardín y se olvidan de lo más importante, que es hacer justicia y tener misericordia y fe. Sí, hay que diezmar, pero no se puede dejar a un lado lo que es aun más importante. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Qué aflicción les espera, maestros de la ley religiosa y fariseos! ¡Hipócritas! Pues se cuidan de dar el diezmo sobre el más mínimo ingreso de sus jardines de hierbas, pero pasan por alto los aspectos más importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Es cierto que deben diezmar, pero sin descuidar las cosas más importantes. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, que son unos hipócritas! Ustedes pagan el diezmo hasta sobre la menta, el anís y el comino, pero no cumplen la Ley en lo que realmente tiene peso: la justicia, la misericordia y la fe. Ahí está lo que ustedes debían poner por obra, sin descartar lo otro. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! que diezmáis la menta, el eneldo y el comino,° pero dejasteis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe.° Esto era necesario hacer sin dejar aquello. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que os preocupáis por el diezmo de la menta, del hinojo y del comino, mientras habéis descuidado lo de más peso en la ley: la justicia, la misericordia y la lealtad! Esto es lo que había que practicar, sin dejar aquello. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y omitís lo más importante de la ley; la justicia, y la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer lo otro. |
El Señor prefiere que practiquemos la justicia y la honradez en lugar de los sacrificios.
¿No siembra al fin sus diversos granos, cada cual en una sección del terreno?
El Señor dice: Sean justos. Procedan con rectitud. Ayuden a los que requieren justicia. Deténganse en sus maldades. Protejan los derechos de los extranjeros e inmigrantes, de los huérfanos y las viudas; ¡dejen de matar inocentes!
Lo que más quiero de ustedes no son sus sacrificios rituales, sino que amen a Dios y a su prójimo; lo que más quiero de ustedes no son sus ofrendas, sino que me reconozcan y respeten como su Dios.
»La décima parte del producto de la tierra, sean cereales o frutas, es del Señor, y es santa.
¡Pueblo de Dios! Ya el Señor les ha dicho qué es lo que él espera que ustedes hagan. Ya él les ha enseñado lo que es bueno y espera que ustedes hagan. Lo que el Señor les pide es que practiquen la justicia, que sean misericordiosos y que vivan siguiendo fielmente sus instrucciones.
Y si comprendieran lo que quieren decir las Escrituras con “Misericordia quiero, no sacrificio”, no condenarían a quienes no son culpables.
»¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, porque ni entran al reino de los cielos ni dejan entrar a nadie!
Vayan y traten de entender el texto que dice: “Misericordia quiero, no sacrificios”, porque yo no he venido a llamar a los buenos, sino a los malos.
»¡Ay de ustedes, fariseos!, porque se cuidan de dar la décima parte de la menta, de la ruda y de toda clase de legumbres, pero no tienen cuidado de la justicia y el amor de Dios. Debían haber hecho eso, sin dejar de hacer lo otro.
Ayuno dos veces a la semana y te doy la décima parte de todo lo que gano”.
Samuel respondió: ―¿Se complace el Señor tanto en los holocaustos y sacrificios como en que se obedezcan sus palabras? La obediencia es mucho mejor que los sacrificios. Él prefiere que le obedezcas a que le ofrezcas la gordura de los carneros.