Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Lucas 14:27 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

El que no carga su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Además, si no cargas tu propia cruz y me sigues, no puedes ser mi discípulo.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

El que no carga con su propia cruz para seguirme luego, no puede ser discípulo mío.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Cualquiera que no carga su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.°

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Quien no lleva su cruz y viene tras de mí no puede ser mi discípulo.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y cualquiera que no trae su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Lucas 14:27
12 Tagairtí Cros  

Y el que se niegue a tomar la cruz y seguirme, no es digno de ser mío.


pero no hay profundidad en su experiencia, y las semillas no echan raíces profundas; luego, cuando aparecen los problemas o las persecuciones por causa de sus creencias, el entusiasmo se le desvanece y se aparta de Dios.


Jesús lo miró con amor y le dijo: ―Sólo te falta una cosa: ve, vende todo lo que tienes y dalo a los pobres, y tendrás tesoros en el cielo. Luego ven y sígueme.


A un hombre de Cirene, que pasaba por allí al regresar del campo, lo obligaron a llevar la cruz. El hombre se llamaba Simón, y era padre de Alejandro y de Rufo.


»Supongamos que alguno de ustedes quiere construir una torre. ¿Qué tendría que hacer primero? Tendría que sentarse a calcular el costo, para ver si tiene lo suficiente para terminarla,


Jesús salió cargando su propia cruz, iba hacia el Gólgota, que en arameo significa de la Calavera.


donde fortalecieron a los discípulos y los animaron a seguir firmes en la fe. Les decían que era necesario que entraran al reino de Dios después de pasar por muchas tribulaciones.


Por ese motivo padezco estos sufrimientos. Mas no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que puede guardar lo que le he encomendado hasta el día de su retorno.


¡Quien quiera vivir piadosamente para Cristo Jesús sufrirá persecuciones!