El temor al hombre es una trampa peligrosa, pero la confianza en el Señor trae seguridad.
Lucas 12:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 »A ustedes, mis amigos, les digo que no tengan miedo de los que matan el cuerpo, porque eso es todo lo que les pueden hacer. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Biblia Nueva Traducción Viviente »Queridos amigos, no teman a los que quieren matarles el cuerpo; después de eso, no pueden hacerles nada más. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo les digo a ustedes, mis amigos: No teman a los que matan el cuerpo y después ya no pueden hacer nada más. La Biblia Textual 3a Edicion Y os digo amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después de esto no pueden más hacer. Biblia Serafín de Ausejo 1975 A vosotros os lo digo, amigos míos: no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero después de esto no pueden hacer más. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y yo os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. |
El temor al hombre es una trampa peligrosa, pero la confianza en el Señor trae seguridad.
Aquí estoy en mi huerto, amada mía, novia mía. Reúno la mirra con las especias mías y como mi panal con la miel. Bebo mi vino con mi leche. ¡Oh, amado y amada, coman y beban! ¡Sí, beban hasta saciarse!
Su boca es dulcísima, él es todo un amor. Así, oh mujeres de Jerusalén, es mi amado, ¡así es mi amor!
¡Pero tú, oh Israel, eres mío, mi pueblo elegido, porque eres la descendencia de Abraham, y él fue amigo mío!
Así que levántate, vístete y ve a decirles cuanto yo te mande. No les tengas miedo, mantén una postura firme ante ellos.
Y no le tengas miedo al pueblo, porque yo, el Señor, estaré contigo y te libraré en caso de peligro.
porque tenían miedo de lo que harían los babilonios cuando tuvieran noticia de que Ismael había matado al gobernador Guedalías, pues este había sido escogido y nombrado por el rey babilónico.
Hombre mortal, no tengas temor de ellos, no te asustes, aun cuando te amenacen con arrojarte a un pozo lleno de escorpiones. No desmayes ante sus semblantes airados, pues acuérdate que son rebeldes.
No teman a los que pueden matar el cuerpo pero no pueden tocar el alma. Sólo teman a Dios, que es el único que puede destruir alma y cuerpo en el infierno.
No me importa cuánto haya de sufrir ni trato de salvar mi vida. Lo único que me importa es terminar con gozo mi carrera y la tarea que me señaló el Señor Jesús: dar testimonio del inmenso amor de Dios.
Ante la elocuencia de Pedro y Juan, y viendo que eran hombres sin muchos estudios, los miembros del concilio se maravillaron y reconocieron que habían estado con Jesús.
No les tengan miedo alguno a sus enemigos, porque para ellos es señal de destrucción; en cambio, para ustedes, es señal de salvación, y esto proviene de Dios.
Así se cumplió la Escritura que dice: «Abraham creyó a Dios y eso se le tomó en cuenta como justicia». Y a Abraham lo llamaron amigo de Dios.
Pero si sufren por hacer lo que es justo, ¡dichosos sean! No le tengan miedo a nadie ni se asusten.
No temas lo que has de sufrir. Para probarlos, el diablo arrojará a algunos de ustedes en la cárcel y los estará persiguiendo durante diez días. Sé fiel hasta la muerte y yo te daré la corona de la vida.