Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Proverbios 29:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

25 El temor al hombre es una trampa peligrosa, pero la confianza en el Señor trae seguridad.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

25 El temor del hombre pondrá lazo; Mas el que confía en Jehová será exaltado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Temer a la gente es una trampa peligrosa, pero confiar en el Señor significa seguridad.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Es una trampa temblar ante los hombres: el que confía en Yavé está seguro.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

25 El que teme a los hombres caerá en el lazo, Pero el que confía en YHVH es inaccesible.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 El temor a los hombres es una trampa; quien confía en Yahveh vive seguro.

Féach an chaibidil Cóip




Proverbios 29:25
38 Tagairtí Cros  

Abraham respondió: ―Pensé que en este lugar no tendrían ningún respeto por Dios, y que alguien, por quedarse con mi esposa, me mataría.


Allí decía que Sara era su hermana. Por eso, Abimélec, que era el rey de Guerar, hizo que llevaran a Sara a su palacio, para hacerla su esposa.


Cuando los hombres del lugar le preguntaban quién era la mujer que lo acompañaba, Isaac decía que era su hermana. Es que Rebeca era tan bonita, que Isaac tenía miedo de que los hombres de aquel lugar lo mataran si se enteraban que ella era su esposa.


Elías entonces huyó para salvar su vida. Se fue a Berseba, ciudad de Judá, y dejó a su siervo allí.


Clamaron a Dios pidiéndole ayuda, la cual les fue concedida por cuanto confiaban en él. Como consecuencia, los agarenos y todos sus aliados fueron derrotados.


Mejor es confiar en el Señor que confiar en los hombres.


Sostenme, y estaré a salvo; y meditaré en tus decretos continuamente.


Quienes confían en el Señor son firmes como el monte Sion, que jamás será conmovido, que permanecerá para siempre.


Pero a mí, oh Dios, rescátame con tu salvación de mi pobreza y dolor.


El que vive al abrigo del Altísimo, descansará bajo la sombra del Todopoderoso.


Porque el Señor dice: «Por cuanto me ama, yo lo libraré; lo protegeré porque confía en mi nombre.


El que hace caso a la palabra, prospera. ¡Dichoso el que confía en el Señor!


El nombre del Señor es una torre poderosa; los justos acuden a ella y están a salvo.


La codicia provoca peleas; la confianza en el Señor lleva a la prosperidad.


Toda palabra de Dios es verdadera. Él protege a los que acuden a él en busca de protección.


Pon manos a la obra que te corresponda, y si temes a Dios puedes confiar en sus bendiciones.


¿Por qué les tienen más temor a esos dioses que a mí? ¿Por qué no me consagran ni la sobra de un recuerdo? ¿Será porque he sido demasiado bueno, y por eso no me temen?


Entonces Nabucodonosor dijo: «Digno de todo elogio sea el Dios de Sadrac, Mesac y Abednego, pues envió su ángel para librar a sus servidores que confiaron en él y desobedecieron la orden del rey, y estaban dispuestos a morir antes que servir o rendir homenaje a cualquier dios que no fuera el de ellos.


El rey se puso muy contento y ordenó que Daniel fuera sacado del foso. Y no se encontró siquiera un rasguño en él, porque había confiado en su Dios, quien lo protegió.


No teman a los que pueden matar el cuerpo pero no pueden tocar el alma. Sólo teman a Dios, que es el único que puede destruir alma y cuerpo en el infierno.


Los discípulos se le acercaron y le dijeron: ―Los fariseos se ofendieron por esas palabras.


»A ustedes, mis amigos, les digo que no tengan miedo de los que matan el cuerpo, porque eso es todo lo que les pueden hacer.


Este fue una noche a visitar a Jesús y le dijo: ―Maestro, sabemos que Dios te ha enviado a enseñarnos, porque nadie puede hacer las señales milagrosas que tú haces si Dios no está con él.


Sus padres contestaron así porque tenían miedo de los judíos, pues estos se habían puesto de acuerdo para expulsar de la sinagoga a todo el que reconociera que Jesús era el Cristo.


“Cuando tomen decisiones”, les dije; “no favorezcan a un hombre porque sea rico; sean justos con el grande y con el pequeño. No teman si a ellos no les agrada el fallo de ustedes, porque ustedes son jueces en el nombre de Dios. Los casos demasiado difíciles tráiganmelos a mí, y yo los resolveré”.


Por medio de Cristo, ustedes creen en Dios, que lo resucitó y lo llenó de gloria, para que ustedes pongan su fe y esperanza en Dios.


―Si me atan con cuerdas nuevas que jamás hayan sido usadas —le respondió—, seré tan débil como cualquier otro hombre.


―He pecado —reconoció finalmente Saúl—. Sí, he desobedecido tus instrucciones y el mandamiento del Señor. Le tuve miedo al pueblo y les dejé hacer lo que quisieron.


por lo que fingió estar loco. Arañaba las puertas y dejaba que la saliva le corriera por la barba,


Pero David se dijo: «Algún día Saúl me va a encontrar y me dará muerte, por lo tanto me iré a territorio de los filisteos hasta que Saúl deje de buscarme. Sólo así volveré a tener seguridad».


Como a nadie dejaban vivo, nadie podía ir a Gat y decir a dónde habían ido realmente. Esto ocurrió una y otra vez mientras David vivió entre los filisteos.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí