allí está el Néguev y el valle del Jordán; y Jericó, la ciudad de las palmeras; y Zoar —le dijo el Señor—.
Jueces 3:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Con él se aliaron los amonitas y los amalecitas, y derrotaron a los israelitas y tomaron posesión de Jericó, la Ciudad de las Palmeras. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Este juntó consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y vino e hirió a Israel, y tomó la ciudad de las palmeras. Biblia Nueva Traducción Viviente Eglón se alió con los amonitas y los amalecitas y salió a pelear, derrotó a Israel y tomó posesión de Jericó, la ciudad de las palmeras. Biblia Católica (Latinoamericana) Los moabitas se aliaron con los amonitas y con los amalecitas para luchar contra Israel, y se apoderaron de la Ciudad de las Palmeras. La Biblia Textual 3a Edicion Y reunió consigo° a los hijos de Amón y de Amalec, y atacó a Israel, y conquistaron la ciudad de las Palmeras. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Congregó Eglón en torno suyo a los amonitas y los amalecitas y partió contra Israel, lo derrotó y conquistó la ciudad de las Palmeras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y juntó consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y fue, e hirió a Israel, y tomó la ciudad de las palmeras. |
allí está el Néguev y el valle del Jordán; y Jericó, la ciudad de las palmeras; y Zoar —le dijo el Señor—.
Cuando la tribu de Judá entró en su nueva tierra en el desierto del Neguev al sur de Arad, los descendientes del suegro de Moisés, miembros de la tribu de los ceneos, lo acompañaron. Dejaron sus hogares en Jericó, la ciudad de las palmeras, y a partir de entonces las dos tribus vivieron juntas.
Pero el Señor respondió: ―¿No salvé yo a Israel de los egipcios, de los amorreos, de los amonitas, de los filisteos,
de los sidonios, de los amalecitas y de los madianitas? ¿Ha habido alguna ocasión en que Israel haya clamado a mí y yo no lo haya salvado?
y también en Judá, Benjamín y Efraín, porque los amonitas cruzaban el Jordán para atacar a los israelitas. Esto ocurrió durante dieciocho años.
Durante los siguientes dieciocho años el pueblo de Israel sirvió al rey Eglón.
Cuando los israelitas sembraban, los de Madián y de los pueblos vecinos venían