Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Juan 21:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Jesús les dijo: ―Echen la red a la derecha de la barca, y pescarán algo. Así lo hicieron, y ya no podían sacar la red del agua por tantos pescados que tenía.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces él dijo: —¡Echen la red a la derecha de la barca y tendrán pesca! Ellos lo hicieron y no podían sacar la red por la gran cantidad de peces que contenía.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Entonces Jesús les dijo: 'Echen la red a la derecha y encontrarán pesca. Echaron la red, y no tenían fuerzas para recogerla por la gran cantidad de peces.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Él les dijo: Echad la red a la parte derecha de la barca, y hallaréis. La echaron pues, y por la cantidad de peces, ya no tenían fuerzas para arrastrarla.°

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Entonces les dijo: 'Echad la red a la parte derecha de la barca y encontraréis'. La echaron, y era tal la cantidad de peces que no podían sacarla.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar por la multitud de peces.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Juan 21:6
8 Tagairtí Cros  

las aves, los peces y todos los seres del mar.


Los pescadores estarán parados sobre las costas del Mar Muerto, pescando desde Engadi hasta Eneglayin. Las costas estarán llenas de redes secándose al sol. ¡Peces de toda especie llenarán el Mar Muerto tal como en el Mediterráneo!


Cuando llegaron las lluvias, las inundaciones y los fuertes vientos, la casa se derrumbó y su ruina fue irreparable».


Su madre dijo a los sirvientes: ―Hagan lo que él les ordene.


Los que creyeron sus palabras, unos tres mil en total, se bautizaron y se unieron a los demás creyentes


Pero a pesar de todo, muchos de los que oyeron el mensaje lo creyeron, y el número de los creyentes, contando sólo los hombres, era como de cinco mil.