Pero el Señor se ríe de quienes traman contra los justos, pues sabe que para aquellos viene el día del juicio.
Joel 3:14 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 ¡Una multitud inmensa se ha reunido en el valle llamado de la Decisión! ¡Está cercano el día en que el Señor llegará al valle de la Decisión a juzgar a las naciones! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Muchos pueblos en el valle de la decisión; porque cercano está el día de Jehová en el valle de la decisión. Biblia Nueva Traducción Viviente Miles y miles esperan en el valle de la decisión. Es allí donde llegará el día del Señor. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Multitudes y multitudes en el valle del Juicio! ¡Cercano está el día de YHVH en el valle de la Decisión!° Biblia Reina Valera Gómez (2023) Multitudes, multitudes en el valle de la decisión; porque cercano está el día de Jehová en el valle de la decisión. |
Pero el Señor se ríe de quienes traman contra los justos, pues sabe que para aquellos viene el día del juicio.
Escuchen el tumulto en los montes. ¡Escuchen a los ejércitos en marcha! Es el tumulto y el clamor de muchas naciones. El Señor Todopoderoso los ha congregado aquí,
Este es el mensaje de Dios respecto a Jerusalén: ¿Qué sucede? ¿A dónde van todos? ¿Por qué corren a las azoteas? ¿Qué miran?
¡Ay, que ya viene el terrible día del Señor! ¡La anunciada destrucción de parte del Todopoderoso ya se aproxima!
¡Hagan sonar la alarma en Jerusalén! ¡Que el trompetazo de advertencia sea escuchado sobre mi santo monte! ¡Que todo el mundo tiemble de miedo, pues se acerca el día del juicio del Señor!
El Señor los conduce con su voz de mando. El suyo es un poderoso ejército, con innumerables batallones que siguen sus órdenes. El día del juicio del Señor es algo terrible y pavoroso. ¿Quién podrá mantenerse en pie?
Naciones, levántense pronto y suban al valle de Josafat, pues allí estableceré mi juzgado para pronunciar mi juicio sobre todas ustedes.
juntaré los ejércitos del mundo en el valle de Josafat. Allí los juzgaré y castigaré por haber hecho daño a mi pueblo, por haberlo esparcido entre las naciones y haber repartido mi tierra.
»Ese día terrible del Señor está cerca. ¡Se acerca rápidamente! Ese día será tan horrible que hasta los más valientes llorarán amargamente y habrá alboroto por todos lados.
Cuídense de esos perros, cuídense de esos malos obreros, cuídense de esos que mutilan el cuerpo.
Pero Dios ha ordenado ahora que el cielo y la tierra sean reservados para el fuego, para el día del juicio en que todos los impíos serán destruidos.