Escuchen mis correcciones y yo les abriré mi corazón, para que conozcan mis pensamientos.
Joel 2:28 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Después de haber derramado mis lluvias de nuevo, ¡también derramaré mi Espíritu sobre todos ustedes! Sus hijos e hijas profetizarán, sus ancianos tendrán sueños y sus jóvenes tendrán visiones de parte de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Biblia Nueva Traducción Viviente »Entonces, después de hacer todas esas cosas, derramaré mi Espíritu sobre toda la gente. Sus hijos e hijas profetizarán. Sus ancianos tendrán sueños, y sus jóvenes tendrán visiones. La Biblia Textual 3a Edicion ° Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán, Vuestros ancianos soñarán sueños, Y vuestros jóvenes verán visiones. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y será que después de esto, derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros viejos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. |
Escuchen mis correcciones y yo les abriré mi corazón, para que conozcan mis pensamientos.
Hasta que al fin desde el cielo se derrame el Espíritu sobre nosotros. Entonces volverán a producirse enormes cosechas,
¡La humanidad entera contemplará la gloria del Señor! El Señor lo ha dicho y se cumplirá.
Yo proveeré agua abundante para su sed y para sus campos resecos. Y yo derramaré mi Espíritu y mis bendiciones sobre sus hijos.
Haré que sus enemigos se coman su propia carne y se embriaguen con ríos de su propia sangre. El mundo entero sabrá que yo, el Señor, soy su Salvador y Redentor, el Poderoso de Israel.
«Te he llamado para que realices una obra más grande que la de restaurar a Israel y que hagas volver a los sobrevivientes de mi pueblo. ¡Yo te convertiré en luz de las naciones del mundo para que también a ellas les lleves mi salvación!».
Y yo seré el maestro de todos tus ciudadanos y grande será la prosperidad de ellos.
«Escuchen el sueño que anoche me envió Dios», dicen. Y se ponen a inventar mentiras en nombre mío.
Cuenten estos falsos profetas sus sueños, y que mis genuinos mensajeros proclamen fielmente cada palabra mía. ¡Ustedes se darán cuenta entonces que hay mucha diferencia entre la paja y el trigo!
Y pondré mi Espíritu dentro de ustedes para que sigan mis instrucciones y hagan todo cuanto es justo y agradable para mí.
»”¡Yo pondré mi aliento de vida, el Espíritu, en ustedes y vivirán y volverán a su hogar en su tierra! Entonces sabrán que yo, el Señor, he hecho exactamente lo que prometí hacer”».
Y jamás me volveré a alejar de ellos de ellos de nuevo, sino que derramaré mi Espíritu sobre ellos, dice el Señor Dios».
Una noche, durante el primer año del reinado de Belsasar sobre el imperio de Babilonia, Daniel tuvo un sueño que decidió poner por escrito. Esta es la descripción de lo que vio:
Entonces llenaré las vidas de los habitantes de Jerusalén de espíritu de gracia y oración, y ellos pondrán su atención en mí, a quien traspasaron, y se lamentarán de su antiguo error como se llora la muerte de un primogénito, habrá luto como si se les hubiera muerto el hijo mayor.
Yo descenderé y hablaré contigo allí, y tomaré del Espíritu que hay en ti y lo pondré también en ellos. Ellos te ayudarán a llevar la carga de modo que no tengas que hacer este trabajo solo.
El Señor les dijo: ―Hasta con un profeta me comunicaría con visiones y sueños;
Entonces Zacarías, su padre, lleno del Espíritu Santo, dijo esta profecía:
Lo que quería decir con esto era que los que creyeran en él recibirían el Espíritu. El Espíritu Santo todavía no había venido, porque Jesús aún no había sido glorificado.
Él está ahora sentado a la diestra de Dios. Y tal como lo prometió, después de recibir del Padre al Espíritu Santo, lo ha enviado a nosotros. Esto es lo que ustedes han visto y escuchado.
porque para ustedes es la promesa, y para sus hijos, y aun para los que están lejos, pues es para todos a los que el Señor nuestro Dios llame.
Felipe tenía cuatro hijas solteras que poseían el don de la profecía.
Ya no importa si eres judío o griego, esclavo o libre, hombre o mujer. Todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús.
En tiempos remotos, Dios habló muchas veces y de varias maneras a nuestros antepasados por medio de los profetas;
envió soldados para que lo capturasen. Pero cuando llegaron y vieron a Samuel y a los demás profetas que profetizaban, el Espíritu de Dios cayó sobre ellos y ellos también comenzaron a profetizar.
Cuando Saúl supo lo que había sucedido, envió a otros soldados, pero ellos también profetizaron. Y lo mismo ocurrió una tercera vez.
y consultó al Señor sobre lo que debía hacer. Pero el Señor no le contestó ni por sueños, ni por urim, ni por profetas.