¡Ay de ustedes, hipócritas!, porque recorren el mundo en busca de conversos, y una vez que los encuentran los hacen dos veces más hijos del infierno que ustedes mismos.
Gálatas 6:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Lo curioso es que ni siquiera los que están circuncidados guardan la ley, pero quieren que ustedes se circunciden para luego jactarse de que ustedes hicieron lo que ellos querían. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; pero quieren que vosotros os circuncidéis, para gloriarse en vuestra carne. Biblia Nueva Traducción Viviente Ni siquiera los que luchan a favor de la circuncisión cumplen toda la ley. Solo quieren que ustedes se circunciden para poder jactarse de ello y decir a todos que ustedes son sus discípulos. Biblia Católica (Latinoamericana) Por estar circuncidados no es que observen la Ley; tan sólo les interesa la marca en el cuerpo, y se sentirían orgullosos de que ustedes la tuvieran. La Biblia Textual 3a Edicion Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley, pero desean que vosotros seáis circuncidados para gloriarse en vuestra carne. Biblia Serafín de Ausejo 1975 De hecho, ni los mismos circuncidados observan la ley, sino que quieren que vosotros os circuncidéis, para gloriarse en vuestra carne. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley, sino que quieren que vosotros seáis circuncidados, para gloriarse en vuestra carne. |
¡Ay de ustedes, hipócritas!, porque recorren el mundo en busca de conversos, y una vez que los encuentran los hacen dos veces más hijos del infierno que ustedes mismos.
»¡Ay de ustedes, fariseos y escribas hipócritas! Porque diezman hasta la última hojilla de menta del jardín y se olvidan de lo más importante, que es hacer justicia y tener misericordia y fe. Sí, hay que diezmar, pero no se puede dejar a un lado lo que es aun más importante.
Claro, obedézcanlos. ¡Hagan lo que dicen, pero no se les ocurra hacer lo que ellos hacen! Porque ellos mismos no hacen lo que dicen que se debe hacer.
Por lo tanto, nadie debe sentirse orgulloso de seguir a ningún hombre, pues todo es de ustedes.
Es terrible que se jacten. ¿No se dan cuenta de que un poco de levadura fermenta toda la masa?
De todos modos, como mucha gente anda siempre hablándoles de sus cualidades, yo también lo haré.
Porque los verdaderos circuncidados somos nosotros, los que por medio del Espíritu adoramos a Dios y nos llenamos de orgullo de pertenecer a Cristo Jesús. Nosotros no ponemos nuestra confianza en esfuerzos humanos.
Les prometen que serán libres, cuando ellos mismos son esclavos de la corrupción, ya que uno es esclavo de cualquier cosa que lo domine.