Todos estaban conmovidos y felices por esta oportunidad de servir, y al rey David lo invadió una grande alegría.
Esdras 1:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Los cautivos que decidieron quedarse en Persia les dieron de todo: plata, oro, enseres, ganado y artículos valiosos; además de las ofrendas para el templo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y todos los que estaban en sus alrededores les ayudaron con plata y oro, con bienes y ganado, y con cosas preciosas, además de todo lo que se ofreció voluntariamente. Biblia Nueva Traducción Viviente Todos los vecinos colaboraron, dándoles objetos de plata y de oro, provisiones para el viaje y animales. Les dieron muchos regalos valiosos además de todas las ofrendas voluntarias. Biblia Católica (Latinoamericana) Todos los que los rodeaban les entregaron su ayuda de diversas formas: dándoles plata, oro, bienes, ganado, gran cantidad de objetos preciosos, además de las ofrendas voluntarias. La Biblia Textual 3a Edicion Y todos sus vecinos los ayudaron con objetos de plata, con oro, con bienes y ganado y cosas preciosas, aparte de las ofrendas voluntarias. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y todos sus vecinos les prestaron toda clase de ayuda: objetos de plata y de oro, bienes y ganados y cosas preciosas, aparte de todos los donativos voluntarios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y todos los que estaban en sus alrededores corroboraron las manos de ellos con vasos de plata, con oro, con bienes y ganado y con cosas preciosas, además de todo lo que se ofreció voluntariamente. |
Todos estaban conmovidos y felices por esta oportunidad de servir, y al rey David lo invadió una grande alegría.
Los judíos que no vayan deberán proporcionar vestido, transporte y provisiones para el viaje de quienes sí decidan ir; así como una ofrenda voluntaria para el templo de Dios que está en Jerusalén».
Al cuarto día de nuestra llegada se pesaron la plata, el oro y los utensilios en el templo de nuestro Dios, y se le entregó todo al sacerdote Meremot hijo de Urías, que estaba acompañado por Eleazar hijo de Finés, y los levitas Jozabad hijo de Jesúa, y Noadías hijo de Binuy.
Todo cuanto nuestros enemigos pretendían era asustarnos, de modo que nos desanimáramos y no termináramos los trabajos. Así que oré al Señor, y le dije: «Dios mío, dame las fuerzas para continuar esta obra».
Cuando vayas a la guerra, tu pueblo te apoyará gustoso; tu traje de guerra será un traje de gala, y tu fuerza se renovará día tras día como el rocío de la mañana.
El pueblo de Israel hizo lo que Dios les había ordenado, y pidieron a los egipcios plata, oro y telas.
Y el Señor hizo que los egipcios miraran favorablemente a los israelitas y les dieran todo lo que ellos les pedían. Y los egipcios fueron prácticamente despojados de todo lo que poseían.
Cada uno tiene que determinar cuánto va a dar. Que no sea con tristeza ni porque lo obliguen, porque Dios ama al que da con alegría.