Este santuario interior tenía nueve metros de largo, nueve de ancho y nueve de alto. Sus muros y el techo estaban recubiertos con oro puro. El altar de madera de cedro, que estaba frente al Lugar Santísimo, también fue recubierto de oro.
Apocalipsis 21:21 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Cada una de las doce puertas era una perla, y la calle principal de la ciudad era de oro puro, transparente como un cristal. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas era una perla. Y la calle de la ciudad era de oro puro, transparente como vidrio. Biblia Nueva Traducción Viviente Las doce puertas estaban hechas de perlas, ¡cada puerta hecha de una sola perla! Y la calle principal era de oro puro y tan cristalino como el vidrio. Biblia Católica (Latinoamericana) Las doce puertas son doce perlas, cada puerta está hecha de una sola perla. La plaza de la ciudad está pavimentada con oro refinado, transparente como cristal. La Biblia Textual 3a Edicion Las doce puertas son doce perlas:° cada una de las puertas era de una sola perla, y la plaza° de la ciudad era de oro puro, transparente como el cristal. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas estaba hecha de una sola perla. La plaza de la ciudad es de oro puro, como cristal brillante. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas era de una perla. Y la plaza de la ciudad era de oro puro, como vidrio transparente. |
Este santuario interior tenía nueve metros de largo, nueve de ancho y nueve de alto. Sus muros y el techo estaban recubiertos con oro puro. El altar de madera de cedro, que estaba frente al Lugar Santísimo, también fue recubierto de oro.
La mujer, vestida de púrpura y escarlata, estaba adornada de hermosísimas joyas de oro, piedras preciosas y perlas, y sostenía en la mano una copa de oro repleta de obscenidades y de las impurezas de su prostitución.
«¡Pobre, pobre de la gran ciudad, vestida de linos finos, púrpura y escarlata, y adornada con oro, piedras preciosas y perlas!
El ángel traía en la mano una vara de oro para medir la ciudad, sus puertas y sus murallas.
La ciudad misma era de oro puro, transparente como el vidrio. La muralla era de jaspe.
y corría en medio de la calle principal de la ciudad. En ambas riberas crecía el árbol de la vida, que produce frutos todos los meses, doce veces al año, y con sus hojas se curan las naciones.
y había un mar como de cristal reluciente. En medio y alrededor del trono había cuatro seres vivientes, llenos de ojos por detrás y por delante.