―Dámelo —respondió Elías. Elías tomó el cuerpo del niño y lo llevó al aposento alto, a la pieza de huéspedes donde vivía, y puso al niño en la cama.
2 Reyes 4:10 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Hagamos una habitación en la terraza para que, cada vez que venga al pueblo, se quede ahí. Podemos poner una cama, una mesa, una silla y una lámpara. Así, cuando venga, tendrá un lugar donde quedarse». Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Yo te ruego que hagamos un pequeño aposento de paredes, y pongamos allí cama, mesa, silla y candelero, para que cuando él viniere a nosotros, se quede en él. Biblia Nueva Traducción Viviente Construyamos un pequeño cuarto en el techo para él y pongámosle una cama, una mesa, una silla y una lámpara. Así tendrá un lugar dónde quedarse cada vez que pase por aquí». Biblia Católica (Latinoamericana) construyámosle en la terraza un pequeño cuarto y pongámosle allí una cama, una mesa, una silla y una lámpara. Así, cuando pase por nuestra casa, podrá quedarse ahí'. La Biblia Textual 3a Edicion Te ruego que hagamos un pequeño aposento alto de obra, y preparemos allí para él una cama, una mesa, una silla y un candelabro; y será que cuando venga a nosotros, se retirará allí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Vamos a hacerle arriba una pequeña alcoba de mampostería. Pondremos allí una cama, una mesa, una silla y una lámpara, para que, cuando venga a nuestra casa, pueda recogerse allí'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo te ruego que hagamos una pequeña cámara de paredes, y pongamos en ella cama, y mesa, y silla, y candelero, para que cuando viniere a nosotros, se recoja en ella. |
―Dámelo —respondió Elías. Elías tomó el cuerpo del niño y lo llevó al aposento alto, a la pieza de huéspedes donde vivía, y puso al niño en la cama.
Un día que Eliseo estaba descansando en la habitación, le dijo a su sirviente Guiezi: ―Dile a la mujer que quiero hablar con ella. Cuando ella llegó,
Pero los buenos serán generosos con el prójimo, y Dios los bendecirá por todo lo que hacen.
»Yo, el Rey, les responderé: “Todo lo que hicieron a mis hermanos necesitados a mí me lo hicieron”.
El que les dé un vaso de agua en mi nombre, porque ustedes son de Cristo, les aseguro que tendrá su recompensa.
También estaban Juana, que era esposa de Cuza, el administrador de Herodes, Susana y muchas otras que los ayudaban con lo que tenían.
Cuando vean a algún hermano en necesidad, corran a ayudarlo. Y fórmense el hábito de ofrecer alojamiento a los que lo necesiten.
Tratemos de ayudarnos unos a otros para animarnos al amor y a hacer el bien.
No se olviden de practicar la hospitalidad, porque de esa manera, algunos, sin darse cuenta, hospedaron ángeles.