Así que les dijeron: ―A nosotros no nos está permitido entregarle nuestra hermana a un hombre que no está circuncidado. ¡Eso sería una deshonra para nosotros!
1 Samuel 11:2 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 ―Bien —contestó Najás—, pero con una condición: le sacaré el ojo derecho a cada uno de ustedes como una afrenta para Israel. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Nahas amonita les respondió: Con esta condición haré alianza con vosotros, que a cada uno de todos vosotros saque el ojo derecho, y ponga esta afrenta sobre todo Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente —Está bien —dijo Nahas—, pero con una sola condición. ¡Le sacaré el ojo derecho a cada uno de ustedes para deshonrar a todo Israel! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Najaz el amonita respondió: 'Haré la paz con ustedes con esta condición: les sacaré a todos el ojo derecho, para que así quede humillado todo Israel'. La Biblia Textual 3a Edicion Y Nahas amonita les respondió: Con esta condición pactaré con vosotros: Que a cada uno de vosotros os saque el ojo derecho, y ponga esta afrenta sobre todo Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondióles Najás, el amonita: 'Sólo con esta condición pactaré con vosotros: la de sacaros a todos el ojo derecho, para que sirva de afrenta a todo Israel'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Nahas amonita les respondió: Con esta condición haré alianza con vosotros, que a todos vosotros os saque yo el ojo derecho, y ponga esta afrenta sobre todo Israel. |
Así que les dijeron: ―A nosotros no nos está permitido entregarle nuestra hermana a un hombre que no está circuncidado. ¡Eso sería una deshonra para nosotros!
»¡No escuchen al rey Ezequías! ¡Ríndanse! ¡Podrán vivir aquí en su tierra hasta que yo los conduzca a otra tierra semejante a esta, con muchas cosechas, grano, vino, olivos y miel! Todo esto es mejor que la muerte. No escuchen al rey Ezequías cuando trate de convencerlos de que el Señor los salvará.
Las naciones vecinas se ríen y se mofan de nosotros por todo el mal que nos has enviado.
Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. Moisés se cubrió el rostro con ambas manos, porque tenía miedo de mirar a Dios.
El hombre bueno se preocupa por el bienestar de sus animales, pero el hombre malo es cruel.
Luego le sacó los ojos a Sedequías y lo envió encadenado como esclavo a Babilonia.
Y por si eso fuera poco, no nos has hecho entrar en el país maravilloso que prometiste, ni nos has dado campos y viñas. ¿A quién estas tratando de engañar? No queremos ir.
Los filisteos lo capturaron, le sacaron los ojos y se lo llevaron a Gaza, donde fue atado con cadenas de bronce y lo ocuparon para mover el molino y moler grano en la prisión.
Y los de Jabés mandaron a decir a sus enemigos: «Nos rendiremos. Mañana saldremos y podrán hacer con nosotros lo que quieran».
»Cuando tuvieron miedo de Najás, rey de Amón, vinieron y me dijeron que deseaban que un rey los gobernara. Pero el Señor nuestro Dios era nuestro rey, porque él siempre lo había sido.
David habló con otros que estaban por allí para verificar lo que había oído. ―¿Qué recibirá el hombre que mate al filisteo y ponga fin a nuestra humillación? —les preguntó—. ¿Quién es este filisteo incrédulo que se le permite que desafíe a los ejércitos del Dios vivo?