pero si las hago, crean en mis obras, aunque no me crean a mí. Así se convencerán de que el Padre está en mí y que yo estoy en el Padre.
1 Juan 3:24 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El que obedece a Dios vive con Dios y Dios vive en él. Y sabemos que Dios vive en nosotros por el Espíritu Santo que él nos dio. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado. Biblia Nueva Traducción Viviente Los que obedecen los mandamientos de Dios permanecen en comunión con él, y él permanece en comunión con ellos. Y sabemos que él vive en nosotros, porque el Espíritu que nos dio vive en nosotros. Biblia Católica (Latinoamericana) El que guarda sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él. Pues Dios permanece en nosotros, y lo sabemos por el Espíritu que nos ha dado. La Biblia Textual 3a Edicion Y aquél que guarda sus mandamientos, permanece en Él, y Él en aquél; y en esto sabemos que Él permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El que guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos ha dado. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Él, y Él en él. Y en esto sabemos que Él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado. |
pero si las hago, crean en mis obras, aunque no me crean a mí. Así se convencerán de que el Padre está en mí y que yo estoy en el Padre.
Él es el Espíritu de verdad; el mundo no lo puede recibir porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes.
Te ruego que todos estén unidos. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.
¿No se dan cuenta de que son el templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en ustedes?
¿No saben que el cuerpo es templo del Espíritu Santo, que Dios les dio, y que el Espíritu habita en ustedes? Ustedes no son sus propios dueños,
Y ¿qué unión puede existir entre el templo de Dios y los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios viviente. Como el Señor dijo: «Viviré con ellos y caminaré entre ellos, y seré su Dios y ellos serán mi pueblo».
Por eso, el que rechaza estas instrucciones no rechaza a un hombre sino a Dios, que les ha dado a ustedes su Espíritu Santo.
Guarda bien la preciosa enseñanza que Dios te dio, mediante el Espíritu Santo que mora en nosotros.
Así que conserven ustedes lo que les fue enseñado desde el principio, porque así estarán siempre en comunión con el Padre y con el Hijo.
¿Cómo podemos saber que conocemos a Dios? Si obedecemos sus mandamientos.
En cambio, el amor a Dios se demuestra cuando obedecemos lo que él manda. Así estamos seguros de que estamos unidos a Dios.
El que afirma que está unido a Dios, debe vivir como Jesucristo vivió.
y cualquier cosa que le pidamos la recibiremos, porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada.
Amados, pongamos en práctica el amor mutuo, porque el amor es de Dios. Todo el que ama y es bondadoso da prueba de ser hijo de Dios y de conocerlo bien.