¡Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, poderosos en fuerza, que ejecutáis sus mandatos escuchando la voz de su palabra!
2 Pedro 2:11 - Biblia Version Moderna (1929) mientras que los ángeles, aunque mayores en fuerza y poder, no traen contra ellas juicio injurioso delante del Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente Aun los ángeles, que son mucho más grandes en poder y fuerza, no se atreven a presentar de parte del Señor cargos de blasfemia en contra de esos seres sobrenaturales. Biblia Católica (Latinoamericana) mientras los ángeles, superiores a ellos en fuerza y en poder, no se permiten ninguna acusación injuriosa en presencia del Señor. La Biblia Textual 3a Edicion mientras° los ángeles, que son mayores en fuerza y en poder, no llevan ante el Señor un juicio difamatorio contra ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 mientras que los ángeles, superiores en fuerza y en poder, no pronuncian contra ellos en la presencia del Señor juicio alguno injurioso. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor. |
¡Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, poderosos en fuerza, que ejecutáis sus mandatos escuchando la voz de su palabra!
que hace los vientos sus mensajeros, los flamigeros rayos sus ministros.
Mi Dios ha enviado su ángel, y ha cerrado la boca de los leones, de modo que no me han hecho mal alguno; por lo mismo que delante de él la inocencia fué hallada en mí; asimismo delante de ti, oh rey, ningún mal he hecho.
los hurtos, las codicias, las maldades, el engaño, la lujuria, el ojo maligno, la blasfemia, la soberbia, la insensatez:
y a vosotros que sois afligidos, daros descanso juntamente con nosotros, en el tiempo de la revelación del Señor Jesús, desde el cielo, con sus poderosos ángeles,
Empero el arcángel Miguel, cuando, contendiendo con el diablo, disputaba respecto del cuerpo de Moisés, no se atrevió a traer contra él un juicio injurioso, sino que dijo: ¡El Señor te reprenda!