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Proverbios 11:21 - Biblia Martin Nieto

Ciertamente no quedarán impunes los injustos, mas la posteridad de los justos se salvará.

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Biblia Reina Valera 1960

Tarde o temprano, el malo será castigado; Mas la descendencia de los justos será librada.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Los malvados seguramente recibirán castigo, pero los hijos de los justos serán liberados.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

El malvado nunca quedará sin castigo, pero la descendencia de los justos será salvada.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Con toda certeza°, el malo no quedará sin castigo, Pero la descendencia de los justos será librada.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Jamás el malvado quedará impune, el linaje de los justos se salvará.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Aunque llegue la mano a la mano, el malo no quedará sin castigo; mas la simiente de los justos será librada.

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Proverbios 11:21
15 Tagairtí Cros  

Pero si traspasas la medida del malvado, te aferrarán juicio y sentencia.


En todo tiempo se compadece y da prestado, sus hijos son una bendición.


No vayas tras la multitud para hacer el mal ni declares en un pleito inclinándote a la mayoría, violando la justicia.


No intervengas en causas injustas y no hagas morir al inocente y al justo, porque yo no absolveré al malvado.


El Señor aborrece los corazones depravados, los que obran con integridad le son gratos.


Anillo de oro en jeta de puerco, tal es la mujer bella pero sin seso.


Ninguna adversidad vendrá sobre el justo, mientras que los injustos estarán colmados de males.


El hombre de bien deja su herencia a los hijos de sus hijos, las riquezas del injusto están reservadas para el justo.


El Señor aborrece al arrogante, ciertamente no quedará impune.


Ya no estoy indignado. Si echa espinas y abrojos, les haré la guerra, y los quemaré todos de golpe,


y les daré otro corazón y otro camino, para que me respeten siempre, en bien suyo y de sus hijos después de ellos.


Entonces todos los hombres que sabían que sus mujeres quemaban incienso a dioses extranjeros, y todas las mujeres que estaban presentes -una gran asamblea-, así como todo el pueblo que habitaba en la tierra de Egipto, en Patrós, respondieron a Jeremías:


Porque la promesa es para vosotros y para vuestros hijos, y también para todos los extranjeros que llame el Señor Dios nuestro'.