Yo sé, Dios mío, que tú sondeas los corazones y amas la rectitud; con rectitud de corazón he hecho yo mis ofrendas, y ahora veo con gozo al pueblo aquí presente comprometerse voluntariamente contigo.
Proverbios 11:20 - Biblia Martin Nieto El Señor aborrece los corazones depravados, los que obran con integridad le son gratos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Abominación son a Jehová los perversos de corazón; Mas los perfectos de camino le son agradables. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor detesta a los de corazón retorcido, pero se deleita en los que tienen integridad. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé aborrece al hombre corrompido, los que permanecen íntegros obtienen su favor. La Biblia Textual 3a Edicion Abominación a YHVH son los de corazón perverso, Pero los de camino intachable son su deleite. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh abomina los corazones perversos, pero se complace en quienes obran con rectitud. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Abominación son a Jehová los perversos de corazón; mas los íntegros de camino le son agradables. |
Yo sé, Dios mío, que tú sondeas los corazones y amas la rectitud; con rectitud de corazón he hecho yo mis ofrendas, y ahora veo con gozo al pueblo aquí presente comprometerse voluntariamente contigo.
El Señor es justo y ama la justicia, los justos contemplarán su rostro.
Dichosos aquellos cuya conducta es intachable, los que caminan en la ley del Señor;
Yo sé que el Señor hará justicia a los humildes y defenderá el derecho de los pobres.
Contra ti, contra ti solo pequé y he hecho lo que tú no puedes ver. Por eso tu sentencia es justa y eres recto en el juicio.
Ciertamente no quedarán impunes los injustos, mas la posteridad de los justos se salvará.
El Señor aborrece los labios mentirosos, y se complace en los que dicen la verdad.
La justicia protege el camino del hombre íntegro, el delito causa la ruina del delincuente.
El necio se burla del pecado, entre los hombres rectos está la benevolencia.
El camino de los hombres rectos es evitar el mal, guarda su vida el que vigila su camino.
El delincuente aparenta seguridad, el hombre recto está seguro de su conducta.
porque el Señor aborrece a los perversos, mientras que con los justos se franquea.
tramando en su corazón malos designios, continuamente provocando peleas.
Temer al Señor es aborrecer el mal; la arrogancia y el orgullo, la mala conducta y la boca perversa, las detesto.
El que corrige al escéptico se acarrea afrenta; el que reprende al malvado, ultraje.