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Oseas 11:1 - Biblia Martin Nieto

Cuando Israel era niño, yo le amaba, y de Egipto llamé a mi hijo.

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Biblia Reina Valera 1960

Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Cuando Israel era niño, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo;

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando Israel era niño, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Cuando Israel era un niño, Yo lo amé, Y de Egipto llamé a mi hijo.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando Israel era niño, lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.

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Oseas 11:1
18 Tagairtí Cros  

Habéis visto cómo he tratado a los egipcios y cómo os he llevado sobre alas de águila y os he traído hasta mí.


Tú dirás al Faraón: Esto dice el Señor: Israel es mi hijo primogénito.


Te digo que dejes salir a mi hijo para que me sirva; si no le dejas salir, yo mataré a tu hijo primogénito'.


Porque mucho vales a mis ojos, eres precioso y yo te amo. Por eso a cambio tuyo entrego hombres y pueblos por el rescate de tu vida.


He dejado mi casa, he abandonado mi heredad, he entregado lo que más quería en manos de sus enemigos.


Anda, grita a los oídos de Jerusalén: Esto dice el Señor: Me he acordado de ti, en los tiempos de tu juventud, de tu amor de novia, cuando me seguías en el desierto, en una tierra sin cultivar.


Y entre todas tus prácticas detestables y tus prostituciones no te acordaste de los días de tu infancia, cuando estabas desnuda y descubierta, agitándote en tu sangre.


Pero yo, pasando junto a ti, te vi agitándote en tu sangre y te dije cuando estabas en tu sangre: Vive


Así haré con vosotros, casa de Israel, por vuestra increíble maldad.


Jacob huyó a las llanuras de Siria, Israel sirvió por una mujer, por una mujer guardó rebaños.


Efraín ha dicho: Sí, me he enriquecido, me he hecho una fortuna. Pero todas sus ganancias no podrán compensar los crímenes que haya cometido.


Sin embargo, yo, el Señor, soy tu Dios desde el país de Egipto; no conoces otro Dios más que yo, no hay salvador fuera de mí.


Le haré rendir cuentas de sus fiestas en honor de los baales, a quienes quemaba incienso ataviada de anillos y collares para correr tras sus amantes, olvidándose de mí -dice el Señor-.


'Yo os amo', dice el Señor; y vosotros decís: '¿Cómo que nos amas?'. '¿No era acaso Esaú hermano de Jacob? -dice el Señor-. Sin embargo, yo amé a Jacob


y estuvo allí hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por medio del profeta: 'De Egipto llamé a mi hijo'.


Tú amas a los pueblos, / todos los santos están en tu mano. / Ellos se postraban a tus pies / y marchaban a tus órdenes.


El Señor se fijó en vosotros y os eligió, no por ser el pueblo más numeroso entre todos los pueblos, ya que sois el más pequeño de todos.